La Bolsa de Nueva York cerró hoy en terreno positivo y su principal indicador, el Dow Jones de Industriales, acabó con un ascenso del 1,96% un día después de que la Reserva Federal de Estados Unidos anunciase un plan de estímulo monetario de 600.000 millones de dólares.
Ese índice, que agrupa a 30 de las mayores empresas cotizadas de EE.UU., sumó 219,71 puntos para acabar en 11.434,84 unidades, una cota a la que no había cerrado desde la quiebra de Lehman Brothers en septiembre de 2008.
El selectivo S&P 500 subió un 1,93% (23,1 puntos) hasta 1.221,06 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq ganó un 1,46% (37,07 puntos) para terminar en 2.577,34 unidades.
Wall Street cerró así con esos firmes avances una jornada en la que imperó el optimismo entre los inversores, cuyo ánimo comprador se dejó notar en todos los sectores, especialmente en el de materias primas, que en conjunto subió un 3,6%, así como en el energético (2,67%) y el financiero (2,54%).
El parqué neoyorquino siguió un día después beneficiado por el lanzamiento del esperado plan de estímulo monetario de compra de bonos del Tesoro por parte del banco central estadounidense, con el que se tratará de reactivar el consumo y evitar una deflación.
El nuevo programa de la Reserva Federal inyectará unos 600.000 millones de dólares en el sistema con la intención de conseguir un crecimiento de la primera economía mundial, por encima de los cálculos de los analistas, que habían previsto que la medida fuese de entre 100.000 y 500.000 millones de dólares.
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