“El camino lo tomamos y vamos a un nuevo sistema de salud público, y en ese sentido el Consejo Comunal Las Tres Raíces, de Manicomio, el Eje Comunal Lídice, los Comités de Salud en los Planes de Barrio Adentro, estamos trabajando por este sistema y no vamos a dejar que cámaras venenosas de Globosvisión opaquen la labor del pueblo organizado junto a la Ministra Sader”.
Así respondieron voceros comunales del oeste de Caracas, al desmentir a la empresa televisiva Globovisión, que transmitió un reportaje audiovisual sobre la denuncia de un grupo de médicos, encabezado por el doctor Wilmer Santana, que facilitaron un recorrido parcial de las instalaciones que se están remodelando, para intentar demostrar un supuesto colapso del hospital Jeús Yerena, más conocido como Hospital de Lídice.
“Es parte de un sabotaje organizado que hacen las personas que están en contra del proceso de cambio…”, dijo Jesús Aguilera, uno de los miembros de los Consejo Comunales que hacen vida en el hospital y quien colabora con el traslado de insumos entre otras tareas logísticas.
El material de Globovisión mostró apenas un cuarto que sirve de almacén, pero se cuidó de registrar las áreas rehabilitadas por el Gobierno Bolivariano.
“Sabemos que hay fallas problemas de infraestructura que estamos justamente solucionando…".explicó
María Eugenia Guédez, Directora del hospital.
Recordó que este grupo de médicos ha dicho que no hay insumos. Reconoció que la farmacia del hospital tiene algún déficit, y en algunos momentos no se cuenta con algunos rubros, pero sí hay existencia de medicamentos de alto costo y se le ha demostrado. “Lo están recibiendo los pacientes. Los familiares hasta ahora no lo han comprado y ellos deberían dar fe de ello”, dijo Guédez.
“Yo tuve una reunión con este grupo de médicos para conversar y solucionar las cosas que estén en nuestras manos, pero ellos también deben poner de su parte porque hay un poquito de falta de voluntad para hacer las cosas”, acotó la directora.
Mostrando una carta de este grupo de médicos, Guédez reveló algo inaudito. “Ellos me solicitan, y esto llama la atención sobre un doble discurso, no permitir más remodelaciones del áreas del hospital hasta que no se terminan la anteriores”.
“Me preocupa que pasan este tipo de información y es una forma de trancar para crear su matriz de opinión”.
“Me llama la atención que ellos saben que se han hecho obras como la emergencia pediátrica y la infraestructura de anatomía patológica, que están listas; así como el edificio de Patología, el almacén…” expresó la directora, sobre las obras de remodelación que se ejecutan en el hospital.
Informó que el Presidente Chávez ha aprobado recursos para otras cuatro (4) obras más para el Hospital, entre ellas la cocina, el área de emergencia
y la “vieja” terapia intensiva, que permitirá ampliar la nueva con 3 camas operativas.
Además, un área para quemados, por cuanto a pesar de que desde hace muchos años se atienden pacientes quemados, en realidad no existe una instalación acondicionada especialmente para ello. Los médicos que operan allí están bien capacitados “pero ellos hacían esto en otras áreas como de Cirugía Plástica y traumatología”.
“Quisiéramos que estas áreas se remodelaran instantáneamente pero es imposible y se ha hecho de manera progresiva”, acotó.
“Ahora, ¿Van a permitir o no van a permitir que se haga este tipo de trabajo dentro del hospital?”, se preguntó la directora.
Ángel Riera, director del hospital Psiquiátrico, por su parte, intervino para lanzar un mensaje a quienes intentan por todos los medios entorpecer el trabajo en ese centro de salud.
“Aquí estaremos en pie de lucha. No se equivoquen con nosotros; aquí hay un pueblo y médicos que salimos al frente (…) Quieren distorsionar la verdad y no muestran las obras revolucionarias que se hacen en el país”.
“Los Comités de Salud estamos incorporados en el trabajo. Se vienen haciendo remodelaciones necesarias que tienen su tiempo e inversión”, recordó Jesús Aguilera, vocero comunal de la zona.
“El Gobierno está invirtiendo para mejorar el hospital de Lídice, pero hay una resistencia permanente, que no tiene un año, tiene 12 años. Gracias a Dios hay personal que viene cambiando y tomando conciencia, y sabemos que esa resistencia está débil ante la conciencia de los usuarios y el pueblo que utilizan el Hospital de Lídice”.
VTV