Las preocupaciones por la falta de crecimiento en la eurozona y por la fragilidad del sistema bancario, sumado al temor a una salida incontrolada de Grecia del euro, han hecho perder al euro cerca de un 2 por ciento en la semana.
En lo que va del mes, la moneda única ya ha caído 5% ante las ventas por parte de los grandes fondos de inversión.
El viernes, el euro cotizaba a 1,2525 dólares, cerca del mínimo del jueves de 1,2516 dólares, su nivel más bajo desde julio del 2010.
“El ritmo de caída del euro ha sido muy rápido y el mercado busca un nivel de consolidación, podría situarse en torno a los 1,25 dólares”, dijo Teppel Ino, analista cambiario de Bank of Tokyo Mitsubishi.