Al menos dos miembros de los servicios secretos afganos murieron y otros tres resultaron heridos hoy en un atentado suicida frente a una sede de la agencia de inteligencia nacional (NDS), en el este del país, dijo una fuente policial.
El atentado se produjo hacia las 07.15 hora local (02.45 GMT) cuando el insurgente hizo estallar los explosivos que portaba en su coche frente al edificio de la agencia de inteligencia en Jalalabad, en la provincia de Nangarhar, informó el portavoz de la policía regional, Hazrat Usain.
Los talibanes reivindicaron a través de su cuenta en la red social Twitter la autoría del atentado, al indicar que "un mártir" detonó un coche bomba frente a la sede de "tres plantas" de la NDS en Jalalabad.
Los servicios secretos afganos ya sufrieron un duro golpe el pasado diciembre, cuando su jefe, Asadulá Jalid, resultó gravemente herido en un atentado suicida cometido por un supuesto emisario de la insurgencia talibán.
Jalid, de etnia pastún, como los talibanes y considerado un hombre de confianza del presidente afgano, Hamid Karzai, fue trasladado días después del ataque a un centro médico estadounidense para ser tratado de sus heridas.
La guerra afgana se halla en uno de los momentos más sangrientos once años después de la invasión de EE.UU. y caída de los talibanes, que en los últimos años se han reorganizado y aspiran a restaurar el régimen fundamentalista islámico que hubo entre 1996 y 2001.
Las tropas de la misión de la OTAN (ISAF) comenzaron a mediados de 2011 a retirarse gradualmente de Afganistán y transferir la competencia de la seguridad al Ejército y Policía afganos.
Este proceso debe concluir en 2014, si se cumplen los plazos previstos.
EFE
