Nota de Prensa).- El diputado tachirense Miguel Ángel Rodríguez,denunció lo que a su juicio fue un complot entre el Partido Socialista Unido de Venezuela y sus funcionarios afines en los distintos poderes públicos, para nombrar rectores electorales, magistrados y los jefes del poder ciudadano, burlando la aspiración nacional de recuperar la confianza en las instituciones democráticas.
“Claro que no nos sorprende este nuevo abuso, pero la profundidad del problema debe servir para entender que a esta casta política carente de todo escrúpulo hay que detenerla con un aluvión de votos en las elecciones parlamentarias. Quien no vote le abre camino y se hace cómplice, de quienes han demostrado que su único fin es mantenerse en el poder, así hayan destruido al país y hayan violado todo su estamento legal”.
“Es obligatorio entender la conspiración en la que incurrieron tres poderes para nombrar a los jefes del poder ciudadano. Éste no cumplió su obligación constitucional de formar un comité de postulaciones, negociando con los diputados gobierneros para que se abocaran entonces a hacer la propuesta en la Asamblea Nacional y, violando la calidad de la votación estipulada en el artículo 279 de la Constitución, la directiva de la Asamblea buscó la ayudadita de sus magistrados con una sentencia mandada a hacer por Diosdado Cabello. Así, por ejemplo, ratifican a la Fiscal que no había cumplido con su obligación y convierten al ex abogado del gobierno en Contralor, lo cual es pagarse y darse el vuelto”.Rodríguez advierte a la ciudadanía que no debe caer en el “plan maestro” del oficialismo que en esta ocasión pretende echar un manto de dudas sobre la unidad democrática, a través de todo su dominio mediático, para ocultar sus graves pecados.
Sobre el caso del poder moral, Rodríguez enfatiza que toda la trama estuvo destinada a evitar que el pueblo fuese convocado a elecciones para que tomara la decisión sobre quiénes deberían jefaturar la Contraloría, la Defensoría del Pueblo y la Fiscalía General de la República. “Le negaron al pueblo el derecho a decidir, como el gran elector designado por el artículo 279″.
Respecto del Consejo Nacional Electoral y el Tribunal Supremo de Justicia, Miguel Ángel Rodríguez advierte que la bancada gobiernera “envenenó” toda posibilidad de consenso cuando presentó nombres que demuestran sólo la intención de decirle groseramente al país que aquí se hace exclusivamente lo que al gobierno le da la gana y que no habría tal renovación de poderes.
Rodríguez dice que mientras el gobierno pretende la desmoralización y la desmovilización de la inmensa mayoría que piensa diferente y quiere un país mejor, la respuesta tiene que ser de mayor unidad y de una impecable y arrolladora participación en los comicios parlamentarios. “La Asamblea Nacional no puede seguir siendo la casa de las artimañas. Debe volver a ser la casa de las leyes y a través de ellas recuperar el estado de derecho y de justicia en Venezuela”“Lucena y Oblitas en el poder electoral y algunos nombres controvertidos por sus posiciones políticas en las listas del Tribunal Supremo, echaron a la basura el mandato constitucional de buscar y lograr los mayores consensos en favor de la credibilidad popular en las instituciones. Parece que junto a estos nombramientos, las reiteradas amenazas de los alfiles del gobierno, con insinuaciones de violencia armada contra quienes se opongan al proyecto que ha destruido a Venezuela, configuran el ultimátum que le hacen los chivos del gobierno a más del 70 por ciento de venezolanos que sienten grave inconformidad y deseos de cambio: se la calan o los liquidamos”