EFE-El artefacto explosivo que estalló hoy en una zona comercial de la ciudad de Londonderry (noroeste de Irlanda del Norte) sin ocasionar víctimas fue "arrojado" por hombres enmascarados en una sucursal del banco español Santander, según informó un portavoz de la Policía.
El inspector de la policía norirlandesa John Burrows indicó que el incidente provocó "pánico puro" cuando el dispositivo fue arrojado "en una bolsa" en el edificio.
"Había niños pequeños que fueron evacuados. La gente podía haber muerto cuando la explosión saltó", explicó este policía a los medios británicos.
El dispositivo explosionó en el área Diamond de la citada ciudad sobre las 12.20 horas GMT pero no se registraron víctimas o daños.
El primer ministro de Irlanda del Norte, Peter Robinson, condenó a los responsables de lo sucedido y señaló que no ofrecían a la sociedad nada más que "muerte y destrucción".
Por su parte, el concejal por Londonderry del Sinn Fein Gerry MacLochlainn, dijo a la agencia de noticias británica Press Associated (PA) que "la gente que ha perpetrado el ataque tiene que darse cuenta de que han sido rechazados por la comunidad republicana y deben desistir de forma inmediata".
La detonación ocurrió en la calle Shipquay, un área concurrida cercana al centro de esa ciudad.
La citada calle y las adyacentes de Ferryquay Street, Butcher Street y Bishop Street, fueron evacuadas tras recibir una alerta.
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