Dos niños murieron calcinados y su madre se debate entre la vida y la muerte después de que la familia paterna les rociara con querosene y prendiera fuego en un pueblo de Bangladesh por no pagar una dote, informaron hoy medios locales.
El suceso ocurrió este domingo por la noche en el pueblo de Piargaon, situado en el distrito de Sunamjanj (noreste), mientras Sabiha Begum dormía junto a sus hijos, de 3 y 5 años, en la vivienda familiar.
La familia política de Begum les prendió supuestamente fuego ante la constante negativa de sus padres a pagar una dote por un valor de 300.000 takas (unos 4.000 dólares) a su marido, Nurudín Ahmed, quien trabaja en Kuwait.
"El hermano de Nurudín, Shafiq, su hermana Nasima y su padre, Astor Alí, entraron en el cuarto de Sabiha y sus hijos cuando dormían. Les rociaron con querosene y les prendieron fuego", dijo al diario bangladesí New Age el hermano de Sabiha, Jahidul Islam.
Al escuchar los gritos de Sabiha, los vecinos corrieron al lugar y transportaron hasta el hospital Osmani a la madre y sus hijos, donde los dos pequeños fallecieron horas más tarde.
Sabiha fue trasladada al hospital de Dhaka, donde fue ingresada en la unidad de quemados y se debate todavía entre la vida y la muerte con quemaduras en todo su cuerpo, según fuentes hospitalarias citadas por ese diario.
La Policía ha abierto una investigación y ha registrado ya una denuncia contra los supuestos autores de los hechos, que han huido de la zona.
Aunque es ilegal en Bangladesh, la práctica de la dote continúa siendo común en las zonas rurales. La costumbre tradicional en el sur de Asia era que las familias de los novios casaderos recibieran un pago de manos de las de las novias, como contraprestación al hecho de que las chicas se incorporan al hogar familiar del marido tras la boda.
-EFE-