Un joven de 22 años murió de sed en Inglaterra tras serle negada su dosis de medicamentos. Kane Gorny había superado un cáncer cerebro y se encontraba hospitalizado en el hospital St. George en Tooting, al sur de Londres.
Gorny necesitaba medicamentos para regular sus niveles hormonales después de superar la operación anticancerosa a principios de mes.
Sin embargo, durante la estancia hospitalaria la enfermera se olvidó de darle su medicación y el paciente deliró tanto que se vio obligado a llamar al número de emergencias 999 para pedir ayuda.
Los oficiales se apresuraron al centro asistencial, pero fueron rechazados por el personal que insistió el señor Gorny estaba bien.
La madre del joven, Rita Cronin, dijo que pasó horas tratando de convencer al personalde que su hijo necesitaba atención urgente, pero en repetidas ocasiones le aseguraron que estaba bien.
Con información de Daily Mail.