El entrenador de la selección española de fútbol brindó una entrevista exclusiva a EL BOCÓN en la que habla de todo: sus expectativas de cara al Mundial de Brasil, los rivales que deberá enfrentar en la fase de grupos y de su selección y Perú, con quien jugaría un amistoso en los próximos meses
Vicente del Bosque (Salamanca, 1950) es el hombre que condujo a España a la cima del planeta fútbol. En el Real Madrid, el club al que dedicó media vida, supo gestionar un vestuario "galáctico" con estrellas como Zidane, Ronaldo, Figo o Raúl, para ganar las dos últimas Champions que lucen en el Bernabéu. La Federación Española recurrió a él cuando Luis Aragonés decidió abandonar el banquillo de La Roja tras hacerla campeona de la Europa en 2008. Del Bosque logró superar el listón con el Mundial de 2010 y otra Eurocopa en 2012. Ahora persigue un reto sin precedentes en la historia: encadenar una cuarta corona. El técnico que ha pulverizado todos los registros (haciendo honor al origen latino de su nombre: "el que vence") es un auténtico caballero del balón, que se distingue por el juego limpio y el respeto al adversario.
"La humildad es el camino hacia el éxito". La frase es suya. Pero cómo se inculca la humildad cuando se vive instalado en el éxito durante años...
Pues porque al final solo somos futbolistas, somos entrenadores, representamos a un país y nos van a valorar por lo que hagamos en el futuro, no por lo que hayamos hecho hasta este momento. El primer paso de ese camino es una fase de grupos que arranca con la final del pasado mundial.
¿Le ha ahorrado el sorteo parte del trabajo psicológico?
Yo no esperaba un sorteo fácil, porque no quedan selecciones fáciles. Lo que sí es conveniente es que nos preparemos para la dificultad y, le pongamos el nombre que le pongamos, que vayamos al mundial con la inseguridad propia de aquel que sabe que es complicado. Si vamos con la soberbia, la vanidad de que somos muy buenos y que la primera fase no tiene mayor importancia, pues nos equivocamos. Y por tanto, sí es posible que ese nombre de Holanda nos alerte un poco más todavía, claro.
¿Qué informes maneja de la selección de Chile, recientemente triunfadora en Wembley? ¿Ha cambiado mucho con respecto a la que se midió a España en Sudáfrica?
No. Ya nos causó a todos una buena impresión cuando jugamos un amistoso en 2009 en Villarreal. Siempre que nos hemos enfrentado han sido un rival muy incómodo, de un gran oficio, con jugadores que más que una selección eran un equipo. El nuevo entrenador ha dado continuidad al trabajo de Bielsa.
¿Y qué sabe de Australia, la teórica 'cenicienta' del grupo?
Es la más anónima, aunque ahora se han clasificado por Asia y eso es un valor importante. Iremos conociéndola poco a poco, porque es la gran incógnita del grupo.
España inclinó la balanza entre Europa y Sudamérica en la historia de los mundiales y en las dos últimas ediciones, además de los títulos, los equipos europeos han copado los puestos de honor. ¿Es una tendencia?
Es posible, los mundiales siempre marcan una tendencia en cuanto a los equipos y selecciones que ganan y también en cuanto al estilo de juego. Incluso dentro del propio fútbol europeo, Alemania y Holanda han mirado a España como diciendo "este es el fútbol que a todos nos gustaría". Yo creo que conservan virtudes de toda la vida, como la escuela holandesa ortodoxa o el empuje alemán, y no las van a cambiar.
¿Pero considera que futbolísticamente en estos momentos Europa está un paso por delante de Sudamérica?
En este último mundial sí, pero no lo creo. No solo Argentina y Brasil son potencias en América que parecen las únicas capaces de llevarse el título, sino que se han unido selecciones como Uruguay, Chile, Colombia o Ecuador, que van a dar mucho trabajo a cualquier equipo. Han intentado unir el orden y la organización europea a su talento y lo están logrando. Van a ser rivales muy complicados.
España como campeón y Brasil como anfitrión por su palmarés parten como los equipos a batir. ¿Qué adversarios ve con el rango de verdaderos aspirantes al título?
Principalmente Brasil como país organizador y pentacampeón del mundo, además de reciente ganador de la Copa Confederaciones, va a ser el rival a batir. Y luego estamos un grupo de aspirantes, no me gustaría decir que encabezados por España junto a los que ya sabemos: Alemania, Holanda, Italia, Argentina o incluso Portugal, porque no nos olvidemos que tienen a Cristiano Ronaldo, el mejor o uno de los mejores del mundo. Aunque hay otras selecciones que pueden llegar lejos.
España ha logrado mantener su estilo basado en el balón. ¿Tiene vigencia ese modelo?
Yo creo que sí. Tenemos una misma escuela para los futbolistas que vienen desde abajo y no debemos de volvernos locos ni cambiar. Es cierto que cada día el fútbol nos muestra una exigencia más alta en el juego, más allá del dibujo o la idea que tan buenos resultados nos ha dado.
Como réplica a ese estilo español, Brasil apostó por una presión al límite del reglamento. ¿Le preocupa que la permisividad arbitral se repita en el mundial?
Todos los equipos que juegan contra nosotros, y más Brasil aquel día por el ambiente de una final, intentan no dejarnos posesiones largas. Y la forma de cortar nuestro juego fue esa, es verdad. No tengo ninguna duda de que los árbitros van a intentar hacerlo lo mejor posible, no es un asunto en el que me he metido nunca ni me meteré. Solo les deseo suerte y nada más.
De España se admira su fútbol, la posesión, la circulación, pero los números dicen que se ha basado en la seguridad defensiva: ningún gol encajado en los cruces de los tres torneos que ha ganado. ¿En qué basa su filosofía defensiva?
Esa misma posesión es el comienzo del trabajo defensivo porque cuando perdemos el balón estamos más organizados y comenzamos a defender en el área contraria. Si nosotros le tuviéramos que poner un sello a nuestra selección, nunca diríamos que es un equipo defensivo, pero los hechos dicen que en los últimos torneos y en las fases de clasificación funcionó bien en esa faceta.
Ha dicho usted que los sistemas son solo un punto de partida, un dibujo teórico. La final de la pasada Eurocopa, posiblemente el mejor partido en la historia de España, la ganó por goleada al equipo que inventó el 'catenaccio' y sin delanteros natos en el once. Habrá que revisar los manuales...
El otro día volvimos a ver el partido repetido y, como dices, fue el mejor que hemos jugado en los últimos años. Aunque hubo varias circunstancias que lo propiciaron. Italia acusó el cansancio, las lesiones, el quedarse con un jugador menos... Todo nos rodó a favor de obra.
Hay siete futbolistas que han jugado las tres finales ganadas por España y que podrían estar en Brasil. ¿Se puede hablar de un bloque desde 2008?
Son chicos que han participado en estos tres grandes torneos y forman una generación que va a pasar a la historia del fútbol español. Ha sido un bloque. Lo que pasa es que el inmovilismo es malo y hemos ido introduciendo recambios que fortalecen y le dan consistencia a lo que ya había. Hubo bajas tremendas como la de Marcos Senna, Capdevila, Marchena y otros jugadores que nos ayudaron a ganar en Viena. Poco a poco ha entrado gente de refresco que se ha consolidado y tienen un nombre ya en el ámbito internacional.
Vamos a detenernos en algunos nombres propios, pilares de la selección en esta etapa triunfal. Empecemos en la portería. Iker Casillas, el capitán, el hombre con más partidos, decisivo en los momentos cruciales, no es titular en el Real Madrid. Visto desde fuera parece un problema...
Su entrenador lo ha solucionado de la manera más salomónica posible y va rotando a los dos. No es ningún problema mientras siga activo, entrenando y tenga sus minutos de competición. Si no ocurre nada fuera de lo normal estará con nosotros.
La selección ha tenido un cerebro indiscutible en sus tres conquistas, Xavi. Incluso en la última Eurocopa ejerció ese liderazgo de manera admirable en la final ante Italia.¿Con 33 años sigue siendo indiscutible? ¿Hay plan B sin Xavi?
Pues eso nos lo va a dar el tiempo, estos seis meses que nos quedan por delante hasta la fase final de la Copa del Mundo. Y por otro lado espero que sí. Cuando un jugador de esta dimensión se retira, parece que el futuro es dudoso, pero tenemos jugadores por detrás que van a suplir a los que se van. Los Illarramendi, Isco, Coke o Thiago, por ponerte un grupo de centrocampistas, van a ser el relevo de los Cazorla, Cesc, Iniesta, Xabi Alonso o Sergio Busquets, que son los que están ahora.
En la delantera ha probado usted diferentes fórmulas y hace unos meses afirmaba que ninguna le convencía plenamente. ¿Es Diego Costa la solución? ¿Qué espera que aporte al juego de la selección, además de una competencia por ir al mundial que va a ser feroz?
Lo más importante es que es un gran jugador que está en disposición de jugar con la selección española, que ha aumentado la competencia y que ninguno de los jugadores que pueden aparecer en ese puesto es igual. Costa es otro complemento más para los delanteros que tenemos en España. Desde Villa a Costa, hay un ramillete de jugadores que cualquiera de ellos puede venir y estaremos muy atentos en estos seis meses para intentar acertar al máximo.
¿Y está seguro, a pesar de no haberlo visto en ningún ensayo previo, que se adaptará sin problemas al juego de La Roja?
Espero que sí porque es un jugador que tiene mucha energía, que juega dependiendo de los demás pero también se sabe ganar él mismo su lugar en el campo. Es una alegría para todos los centrocampistas por su movimiento constante, sus desmarques y sus apariciones en todo el frente de ataque.
¿Le sorprendió su decisión de decir "no" al país donde nació?
Es una decisión muy difícil y que nosotros no hemos mediatizado en absoluto, estábamos pendientes de la opción que iba a tomar. Para nada lo hemos dramatizado ni hecho una escenificación de un asunto que era propio del jugador, nada más.
¿Teme que su presencia pueda polarizar la animadversión de los brasileños hacia España en el mundial?
No, no creo que ni más ni menos que la que tuvimos en la Copa Confederaciones, cuando íbamos por la calle y la gente fue muy cariñosa con nosotros. No espero que ese afecto cambie para nada, aunque luego en los partidos, sobre todo si jugamos contra Brasil, es posible que se vuelvan en contra, pero eso debemos de dominarlo.
En los amistosos previos al mundial van a jugar en Lima ante Perú. ¿Por qué eligieron a este rival y qué conocimientos tiene del fútbol peruano? Un país ausente de los mundiales desde hace demasiado tiempo, precisamente desde España 82.
Perú es un equipo que marca lo que es Sudamérica a nivel futbolístico. Hay una gran competencia, no es fácil clasificarse en ese grupo. No podemos olvidar que Uruguay, cuarto en la pasada copa mundial, tuvo que jugar repesca para clasificarse. Por tanto, hay muy buenas selecciones. Elegimos Perú porque es un rival que encaja bien en nuestra preparación y además geográficamente es un paso intermedio para acercarnos a Brasil. Será un gran rival antes de incorporarnos el día 8 a la concentración mundialista.
Pizarro, Farfán Guerrero, Carrillo... Individualmente es una selección con nombres.¿Por qué cree que no da un salto cualitativo?
Es cierto, y además son futbolistas que han hecho carrera en el fútbol europeo en algunos casos. Yo creo que principalmente lo que sucede es, al igual que en otros lugares, que la competencia es máxima y no son tantas las plazas para clasificarse. Debe intentar hacer una selección fuerte para la Copa América y prepararse para el próximo mundial.
¿Estaría usted de acuerdo con aumentar el cupo de selecciones sudamericanas para ese próximo campeonato?
Buuff... Pues no lo sé. No me gustaría que bajaran el cupo en Europa porque en cualquier momento puedes estar en un tris de ir a la repesca. Nosotros tuvimos que jugárnosla en Francia y eso siempre es duro para una selección como la nuestra, que está acostumbrada a jugar las fases finales.
Hay un joven internacional peruano, Cristian Benavente, enrolado en el Real Madrid, al que la Federación seguía de cerca por la posibilidad de jugar con España. ¿Eso es así y cómo definiría a este futbolista?
Ha estado en nuestra agenda. Los técnicos de las categorías inferiores le conocen perfectamente. Yo también le he visto algún partido con el Castilla y sí me ha gustado. Perú le llamó y es una decisión del chaval. No sé si pudo ser otro caso como el de Costa y si hubo o no acercamiento de la Federación. No quiero hacer comentarios que no se correspondan con la realidad. Si un chico tan joven juega con la selección absoluta, es porque tiene proyección, y es válido para ello, claro.
¿Qué le dirá a sus jugadores cuando llegue el temido momento amargo después de tantas satisfacciones? ¿Hay que estar preparado para la derrota?
Para la derrota no se prepara nadie. Nos vamos a preparar para la victoria, para luchar, para ganar, para ser un incordio para los demás adversarios, decirles que estamos aquí y queremos seguir ganando. Eso es lo que hace un buen deportista y el buen deportista también sabe que hay un porcentaje de que puedas perder y en el caso de un mundial mucho más, porque al fin y al cabo solo gana uno de 32. Y si llega ese momento habrá que saber estar como siempre que hemos perdido.
Por último, usted que lo ha ganado todo, ¿cree en la suerte?
Sí, claro. Desde luego, hay que creer en el trabajo, en el esfuerzo, en la calidad de los jugadores, en la cultura de cuidar la buena relación del grupo... Pero también hay que tener una pizca de suerte para conseguir en cualquier actividad de la vida el éxito.
Pues que esa suerte le acompañe en el desafío de defender su título. Gracias por compartir sus impresiones con El BOCÓN. Lo esperamos en junio.
Ha sido un placer. Un cordial saludo para sus lectores.
EL BOCON
