No hay una regla fija acerca de cuándo cortarle el pelo a tu bebé. Se trata más bien de usar tu sentido común. Si tiene menos de seis meses y poco pelo, más vale no tocárselo. El primer pelo suele caerse al medio año de vida y la cabeza no estará completamente cubierta hasta el año.
El corte se hará necesario si el pelo le cubre los ojos, las orejas o el cuello o si su forma natural de crecimiento es poco estética. Por ejemplo, algunos bebés presentan calvas como resultado de frotarse contra el colchón. En ese caso, si al mismo tiempo hay zonas de pelo largo, es una buena idea cortar para emparejar. Para los cortes con estilo, tendrán que esperar hasta tener dos o tres años.
Sobre la vitalidad capilar, Alexandra Quéméneur, directora del salón Mum&Babe, asegura que “cortar el pelo muy corto no lo debilita ni lo fortalece”.
Las técnicas en casa
Cortar el pelo a un bebé tiende a ser complicado: rabietas, miedos a las tijeras, constante movimiento. Además, el implante del pelo y su movimiento están todavía indefinidos. En otras palabras, si le cortas el pelo en casa, ten en cuenta que el resultado puede no ser el deseado. Alexandra recuerda que también hay riesgos para la seguridad del bebé. Si a pesar de los inconvenientes decides cortarle el pelo tú misma, por ejemplo, para darle forma al flequillo o despejarle la nuca o las orejas, ármate de tijeras con las puntas redondeadas (las que se utilizan para las uñas de los bebés) e instala al bebé en su sillita alta de comer o en el carrito de paseo, con el cinturón atado para limitar sus movimientos. Lo ideal sería que hubiera otra persona para entretenerlo pero también puedes distraerlo dándole la merienda. Si ya la toma solo, la comida captará su atención.
Mientras cortas, háblale y explícale lo que haces para que el nivel de estrés no se dispare. Y por último, corta poco pelo, porque si el corte no te sale perfecto, siempre podrás retocarlo.
Llevarlo al salón de peluquería
Cualquiera sea la opción elegida, cortarle el pelo en casa o en la peluquería, es esencial que el momento elegido sea bueno para el bebé: que haya dormido, que no tenga hambre y que esté limpio. Y como en el caso de cortarle el pelo en casa, tienes que explicarle para qué lo llevas, ya que perder una parte de sí mismo puede perturbarlo. Si esto ocurre, guarda unos mechones en un sobre y dile que se los podrá regalar a un familiar o incluso a Santa Claus, sugiere Alexandra Quéméneur.
Si decides recurrir a tu peluquero, antes de presentártele con tu bebé, pregúntale si puede hacerlo y si acepta, llévalo en un momento en el que el salón esté tranquilo. Las peluquerías para adultos no están preparadas para recibir niños pequeños, con lo cual serás tú quien tenga que sujetarlo sentándolo en la falda, y mantenerlo entretenido para que no proteste. Para cortarle el pelo, será suficiente con que se lo humedezcan con un rociador.
La otra posibilidad es escoger una peluquería especializada en niños y bebés. La decoración infantil lo mantendrá distraído y el personal capacitado sabrá cómo hacerle pasar el rato lo mejor posible. ´´Es necesario que el ambiente sea relajado, que el bebé comprenda nuestros gestos y que permanezcamos atentos a sus reacciones y necesidades´´, señala Alexandra. Y añade que en su salón se hacen ´´todas las pausas que sean necesarias para jugar con el bebe ´´ e incluso las que necesite la madre para amamantarlo o cambiarle los pañales. Según la velocidad del crecimiento del pelo, el corte tendrá que retocarse tres o cuatro veces por año.
Un truco para que tu bebé se familiarice con la peluquería antes de su primer corte de pelo profesional, es llevarlo contigo.a tu salón (a una hora en que haya pocas personas para evitar una espera larga, el ruido de los secadores y el fuerte olor del espray y otros productos capilares, factores todos que podrían irritar al pequeño). Haciéndolo partícipe de tu experiencia, él se dará cuenta de que no es el único en pasar por esa situación. ¡Mamá también!
La otra posibilidad es escoger una peluquería especializada en niños y bebés. La decoración infantil lo mantendrá distraído y el personal capacitado sabrá cómo hacerle pasar el rato lo mejor posible.
Un truco para que tu bebé se familiarice con la peluquería antes de su primer corte de pelo profesional, es llevarlo contigo a tu salón (a una hora en que haya pocas personas para evitar una espera larga, el ruido de los secadores y el fuerte olor del espray y otros productos capilares, factores todos que podrían irritar al pequeño). Haciéndolo partícipe de tu experiencia, él se dará cuenta de que no es el único en pasar por esa situación.
Fuente: Yahoo