El centro de convenciones McCormick Place de Chicago recibirá durante cinco días, a más de 30.000 expertos que asisten a esta 52 reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica, donde se presentan más de 5.200 estudios que apuestan por la inmunoterapia como línea de investigación de futuro en el tratamiento del cáncer.
Las compañías farmacéuticas, de la mano de oncólogos e investigadores, apuestan por la inmunoterapia como línea de investigación de futuro en el tratamiento del cáncer y será esta terapia, un año más, la que acapare la atención en Asco, la cita mundial de la oncología que mañana comienza en Chicago.
Una cita que este año enfoca la atención y la investigación hacia el paciente y hace hincapié en que la sabiduría colectiva es la que impulsa el progreso mediante la combinación de diferentes disciplinas, tipos de cáncer, métodos de tratamiento y cruce de datos, informa la organización.
Tres son los pilares sobre los que pivotará este encuentro mundial de la oncología: la inmunoterapia, las terapias dirigidas y nuevos enfoques de las terapias convencionales (quimioterapia y radioterapia) para que sean más beneficiosas para el paciente.
La inmunoterapia consiste en estimular el sistema inmunológico del paciente para que luche contra unas células tumorales que han conseguido enmascararse y crear mecanismos de resistencia.
Los fármacos inmunoterápicos son capaces de quitar a las células tumorales ese disfraz de células sanas para que los linfocitos T del sistema inmunitario las reconozcan y eliminen. No actúan directamente contra el tumor, sino que abren camino para que sean las defensas del organismo las que lo hagan.
Y eso es una de sus fortalezas, ya que, un mismo fármaco puede servir para distintos tipos de tumores, independientemente de su biología.
La gran revolución solo lleva en marcha seis años y llegó con el ipilimumab (anticuerpo monoclonal de Bristol Myers), el primer fármaco inmunológico que se empleó en melanoma en estado metastásico y que ha probado larga supervivencia en pacientes que en el 80% de los casos no sobrevivían.
“Tenemos pacientes que siguen viviendo doce años después del diagnóstico con respuesta cortas o parciales que no progresan y que hacen vida normal. Son pacientes con nombre y apellido”, asegura la oncóloga Eva Muñoz del Hospital Vall D’Hebrón de Barcelona en una reunión informativa previa a la cita de Asco.
La inmunoterapia ya es una realidad en melanoma, pero también existen resultados prometedores para cáncer de pulmón, uno de los más prevalentes, renal o próstata, entre otros.
Las farmacéuticas acuden a Asco con ensayos clínicos, cuyos resultados están embargados hasta su presentación, en los que la combinación de diferentes fármacos inmunoterápicos o de estos con quimioterapia tratan de poner freno al cáncer.
Así Bristol Myers, pionero en inmunoterapia, presentará en Chicago datos sobre la combinación de ipilimumab y nivolumab en varios tipos de tumores, incluyendo la primera línea de tratamiento en cáncer de pulmón no microcítico, glioblastoma multiforme recurrente y cáncer colorrectal metastásico.
También ofrecerán datos de supervivencia a largo plazo para tumores como el de pulmón no microcítico (un subtipo que representa el 85% de todos los cánceres de pulmón) y microcítico, melanoma avanzado y carcinoma de células renales.
Roche, por su parte, acude, entre otros, con investigaciones con atezolizumab, un anticuerpo monoclonal en experimentación, en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico y nuevos datos de este fármaco en cáncer de vejiga localmente avanzado o metastásico.
La compañía AstraZéneca también apuesta por la inmunooncología y presentará nuevos datos sobre durvalumab en cáncer de vejiga y en cáncer de pulmón no microcítico como tratamiento de primera línea, además de nuevos medicamentos en desarrollo que actúan sobre la respuesta al daño en el ADN en distintos tipos de tumores.
Pero en Asco también destacarán los avances en terapias dirigidas contra receptores tumorales, la medicina de precisión que actúa directamente contra la diana tumoral.
Si hay algún cáncer donde estos tratamientos personalizados haya calado es en el cáncer de mama y, en especial, en los que expresan el subtipo HER2. Así, Roche presenta un estudio de supervivencia global con bevacizumab en HER2 negativo metastásico.
En la sesión plenaria, el 5 de junio, donde se seleccionan los trabajos más trascendentes, se verán varios estudios de cáncer de mama y otros sobre glioblastoma (cáncer cerebral más común en adultos), neuroblastoma infantil (un tipo de cáncer que se desarrolla a partir del tejido nervioso) y mieloma múltiple, un tipo de cáncer de médula ósea producido por una degeneración del ADN de las células plasmáticas.
Con información de EFE