El árbitro brasileño Valerio Fernandes Gama, de 32 años y quien hace parte de la división profesional del Campeonato Cearense, en el nordeste del país, confesó que en las noches tiene una vida de "mujer", informó la prensa digital.
"Mi nombre de mujer es Laleska, sólo de noche, cuando salgo a bailar en mi ciudad, Beberibe", en el estado de Ceará, declaró Fernandes Gama a la edición en internet del diario Folha de Sao Paulo.
Fernandes Gama, sin embargo, negó que haya sido discriminado por su condición homosexual: "de todos los árbitros de Ceará soy el único homosexual. Nunca nadie me dijo nada, me respetan como si fuera una mujer. En el fútbol, nunca sufrí discriminación o prejuicios".
En una de sus anécdotas, el árbitro contó que alguna vez los jugadores del Ferroviario, club cearense, lo "descubrieron" y "reconocieron" en una discoteca, pero diferente de la reacción que esperaba, los deportistas lo felicitaron por tener "coraje" para estar en la profesión de juez de fútbol.
No obstante, muchos jugadores cuando no lo conocen le dicen "señora", por su apariencia afeminada.
"Es gracioso porque cuando los futbolistas saben quién soy nunca me gritan, como a los otros, (a los que les dicen) "maricón", "puto", sino que apenas me dicen "ladrón" cuando cobro algo que no les gusta", detalló el árbitro, quien tiene siete hermanos, tres de ellos homosexuales asumidos como él.
EFE
"Mi nombre de mujer es Laleska, sólo de noche, cuando salgo a bailar en mi ciudad, Beberibe", en el estado de Ceará, declaró Fernandes Gama a la edición en internet del diario Folha de Sao Paulo.
Fernandes Gama, sin embargo, negó que haya sido discriminado por su condición homosexual: "de todos los árbitros de Ceará soy el único homosexual. Nunca nadie me dijo nada, me respetan como si fuera una mujer. En el fútbol, nunca sufrí discriminación o prejuicios".
En una de sus anécdotas, el árbitro contó que alguna vez los jugadores del Ferroviario, club cearense, lo "descubrieron" y "reconocieron" en una discoteca, pero diferente de la reacción que esperaba, los deportistas lo felicitaron por tener "coraje" para estar en la profesión de juez de fútbol.
No obstante, muchos jugadores cuando no lo conocen le dicen "señora", por su apariencia afeminada.
"Es gracioso porque cuando los futbolistas saben quién soy nunca me gritan, como a los otros, (a los que les dicen) "maricón", "puto", sino que apenas me dicen "ladrón" cuando cobro algo que no les gusta", detalló el árbitro, quien tiene siete hermanos, tres de ellos homosexuales asumidos como él.
EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario