"Aquí, listo para iniciar la Batalla!", saluda cada mañana. "Por aquí, cerrando otra jornada de esta Batalla por la Vida", se despide por la noche. Envía saludos a funcionarios y amigos: "Epa, Luis! Aquí vamos!", y aprueba fondos millonarios: "Acabo de aprobar recursos para Mérida!". Invariablemente, da las buenas noches con su nueva consigna: "Viviremos y Venceremos!".
Es el presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, twitteando desde su "trinchera de la retaguardia", como le llama al hospital habanero donde recibe tratamiento médico contra el cáncer desde hace una semana.
Durante su primera estancia en Cuba, en junio pasado, cuando fue operado de un tumor canceroso, solía aparecer en fotos y videos en medio de un jardín frondoso, rodeado de arbustos y palmas reales, junto a sus hijas y Fidel Castro, pero ahora, una semana después de su retorno, sólo aparece en su cuenta "@chavezcandanga" de Twitter.
La oposición venezolana le critica por gobernar el país desde el exterior, con "control de mando", pero él no se inmuta y afirma que está ejerciendo plenamente sus funciones de gobierno. Antes de partir de Caracas rumbo a La Habana, había prometido estar "atento cada día, cada minuto, del acontecer interno" de Venezuela.
"Efectivamente, Chávez esta despachando desde La Habana, y comunicándose con sus seguidores a través de Twitter. Es una nueva forma de gobernar un país", dijo a la agencia dpa desde Washington el académico Michael Shifter, presidente del Diálogo Interamericano, uno de los principales centros de reflexión sobre América Latina en Estados Unidos.
"Es una mezcla de un viejo modelo de caudillismo con una nueva tecnología y medio social de comunicación", agregó Shifter.
Desde Twitter, donde ya tiene más de 1,8 millones de seguidores, Chávez da instrucciones y aplaude las acciones de sus colaboradores. "Muy bien por la Gran Misión Vivienda! Felicito al Vicepresidente y a ese ejército de constructores!", escribe. "Ese Proyecto del Parque Bolívar es un verdadero regalo para nuestra bella Caracas!", dice en otro mensaje.
Informa de las visitas que recibe -"Qué bonita reunión hemos tenido con Fidel, Raúl y Rafael Correa!"-, sobre las que la prensa cubana no publica ni una sola línea, y contesta a sus colegas de América Latina que se interesan por su salud: "Oye Presidente (Felipe) Calderón, amigo mío, te agradezco tus buenos deseos". Y entre medio comenta la actuación de la selección venezolana en la Copa América: "Ay compadreee! Qué Golazooo!".
Chávez no es el único presidente que utiliza las nuevas tecnologías para mantener comunicación con la opinión pública. Barack Obama hizo recientemente una sesión de Twitter y los seis candidatos republicanos a la presidencia utilizaron la misma red social para un primer debate, pero es probable que el mandatario venezolano sea el primer político que tiene a Twitter, al menos en estos días de retiro en La Habana, como única ventana hacia el exterior.
Michael Shifter declaró a la agencia dpa que Chávez "ha delegado algunas funciones" en algunos miembros de su gabinete, pero que "le cuesta mucho soltar la riendas, aún si Fidel (Castro) le aconseja hacerlo".
"Chávez -subrayó- no confía mucho en la gente que lo rodea. Por lo tanto Twitter sirve no sólo como canal de comunicación, sino como una herramienta en la toma de decisiones, en una situación política insólita".
El lugar donde se encuentra Chávez es un virtual secreto de Estado, que no ha sido revelado ni por las autoridades cubanas ni por las venezolanas. Se sabe que durante su estancia en Cuba ha recibido la visita de algunos de sus colaboradores íntimos, como el canciller Nicolás Maduro, quienes sin embargo también guardan el mismo silencio.
Es la misma reserva que mantiene el gobierno cubano sobre el lugar donde está siendo tratado Fidel Castro, cuyo estado de salud le obligó a declinar el poder en favor de su hermano Raúl hace cinco años
Los corresponsales extranjeros especulan que podría estar hospitalizado en el Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas (Cimeq), ubicado a unos diez kilómetros al oeste de La Habana, en el Hospital Hermanos Ameijeiras o en el Instituto Nacional de Oncología y Radiobiología, ambos en la capital.
Durante su primera estancia en La Habana, la prensa oficial cubana difundió videos de las visitas que recibió de los hermanos Castro, y la televisión le hizo una larga entrevista telefónica, en la que dio detalles de las operaciones a las que fue sometido el 10 y 20 de junio pasado.
Pero, en esta segunda estancia, la prensa local se ha limitado a informar sobre su arribo a La Habana, el 16 de julio pasado, sin desvelar el secreto de su residencia. Un corresponsal extranjero preguntó a un diplomático latinoamericano si sabía donde se encontraba Chávez. "¡En Twitter!", respondió sin asomo de duda.
DPA