DPA) – Por primera vez en una década, el presidente Hugo Chávez arrojó dudas sobre su capacidad de poder seguir al frente del poder en Venezuela. Lo hace debido al cáncer y a pocos días de reasumir el mando para el período 2013-2019, tras su sólida victoria en las elecciones del pasado 7 de octubre.
Chávez, de 58 años, dejó sin aliento al país el sábado en la noche al anunciar que deberá pasar por el quirófano por cuarta vez en el último año y medio y asegurar que su elegido para sucederle es su vicepresidente Nicolás Maduro.
“Se ha decidido que es absolutamente necesario someterme a una nueva intervención quirúrgica”, dijo en un mensaje al país transmitido en cadena de radio y televisión. La nueva operación, explicó, se debe a inflamación y dolor en la zona afectada del abdomen.
Chávez fue operado el 10 de junio de 2011 en Cuba por un acceso pélvico y 15 días después regresó al quirófano para extirparle un tumor cancerígeno en el abdomen, sobre el cual el propio presidente informó sin detenerse en detalle de la profundidad de la enfermedad.El anuncio lo hizo una semana antes de las elecciones regionales del 16 de diciembre, en las cuales los candidatos del oficialismo esperaban el impulso del “comandante” en la recta final de la campaña.
Tras la operación se sometió a un tratamiento oncológico con quimioterapia, al cabo del cual afirmó haberse curado. Sin embargo, en febrero pasado fue operado de lo que llamó una “recurrencia” del cáncer y luego fue tratado con radioterapia.
Tres meses después de concluir la radioterapia, Chávez asumió la dura tarea de buscar una segunda reelección con una campaña en la que limitó sus apariciones públicas, pero logró una victoria con el 55 por ciento de los votos, contra el 44 por ciento del opositor Henrique Capriles Radonski.
Luego de ser declarado ganador, el mandatario desapareció prácticamente de la escena pública, con contadas presentaciones en la televisión, en una de las cuales admitió haber abordado la campaña por su reelección en malas condiciones de salud.
El pasado 27 de noviembre, pidió autorización de la Asamblea Nacional (Congreso) para someterse en Cuba a una terapia de oxigenación hiperbárica. Nueve días después regresó a Caracas y esta noche informó que deberá ser operado de nuevo.
Chávez dedicó minutos de su mensaje a llamar a la unidad de las fuerzas que lo apoyan y señaló de que en caso de que no pueda asumir el 10 de enero su nuevo mandato y sean necesarias unas nuevas elecciones, como lo indica la Constitución, propuso a su vicepresidente Nicolás Maduro como el indicado para tomar la sucesión.“Sigo aferrado a Cristo, a pesar de que todo se planifique bien en esta nueva batalla. Sin embargo, en este proceso hay serios riesgos ¿quién puede dudarlo? Contra este mal hay riesgos innegables”, dijo.
“Si se presenta una circunstancia sobrevenida, que me inhabilite para continuar de la frente de la presidencia, bien sea para terminar el mandato que quedan pocos días, y sobre todo para asumir el nuevo período para el cual fui electo por la mayoría del ustedes, si algo ocurriera que me inhabilitara, en ese escenario en que sería obligatorio convocar nuevas elecciones, mi opinión es que ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente. Se los pido de corazón”, señaló.
La Constitución indica que si se declara la ausencia absoluta del presidente en los primeros cuatro años del mandado se deberá convocar a nuevas elecciones. Chávez tiene previsto asumir el 10 de enero para el período 2013-2019.
“En cualquier circunstancia debemos garantizar la marcha de la revolución (bolivariana), la marcha victoriosa de esta revolución, construyendo la patria nueva, construyendo la vía venezolana al socialismo, con amplia participación y libertades”, recalcó el mandatario.
Desde que llegó a la presidencia, en febrero de 1999, Chávez expresó que su deseo era llegar al poder hasta 2021, cuando se cumplirán 200 años de la independencia de Venezuela, para lo cual trabajó arduamente, impulsando reformas de la Constitución que le permitieran reelegirse sin límites.
En casi 14 años de mandato, Chávez fue fiel a su papel de líder único y no preparó un relevo de liderazgo en su revolución bolivariana.
Maduro, un dirigente obrero que llegó a la Cancillería, se ganó la confianza de Chávez, acompañándolo en sus momentos más difíciles de convalececia en La Habana.
En abril de 2002, Chávez fue sacado del poder por 48 horas, pero debido a un intento golpista de generales rebeldes, que al fracasar permitió su retorno victorioso a la casa de gobierno de Miraflores.
Para la continuidad del líder bolivariano en el poder, ahora los médicos tendrán la palabra.
Por Néstor Rojas Mavares