AFP-Rusia conmemoró este jueves la victoria de 1945 sobre el régimen nazi con un desfile de más de 11.000 militares en la Plaza Roja de Moscú y con bombarderos sobrevolando el cielo, bajo la mirada del presidente ruso, Vladimir Putin, en una demostración de fuerza digna de la Unión Soviética.
Camiones militares que transportaban misiles estratégicos y otros armamentos pesados desfilaron por el centro de la capital rusa para conmemorar el fin de la Segunda Guerra Mundial que se celebra el 9 de mayo en la ex-URSS ya que el acta de capitulación se firmó el 8 de mayo por la noche en Berlín, es decir, el 9 de mayo según la hora de Moscú.
A las 10H00 (06H00 GMT), un gran silencio se extendió por la Plaza Roja, llena de militares, y en la tribuna oficial, donde se encontraban Vladimir Putin y los invitados, entre los que había excombatientes cubiertos de medallas.
El desfile militar comenzó con la revisión de las tropas efectuada por el ministro de Defensa, Serguei Shoigu, que iba de pie en una limusina negra descubierta y saludó a miles de soldados y oficiales que gritaron a coro su tradicional "¡Hurra!" bajo un cielo y una temperatura primaveral.
"Siempre recordaremos que precisamente fue Rusia, la Unión Soviética, quienes hicieron fracasar los proyectos odiosos, sangrantes de los nazis, y les impidieron controlar el mundo", declaró Putin en una breve intervención.
"Nuestros soldados protegieron la libertad y la independencia defendiendo con abnegación su patria, liberando a Europa y haciéndose con una victoria cuya grandeza permanecerá en las memorias durante siglos", añadió.
"Hacemos todo lo posible para que nadie pueda desencadenar una guerra en ningún sitio. Hacemos todo lo posible para reforzar la seguridad en el planeta", añadió Putin.
Tras la caída del régimen soviético en 1991, la dimensión de los desfiles se redujo. Pero Rusia volvió a la senda de estas demostraciones de fuerza, muy apreciadas por Vladimir Putin, que vivieron su apogeo coincidiendo con la celebración de los 65 años de la victoria en 2011, a la que las tropas de la OTAN estuvieron invitadas por primera vez.
Antes de su regreso al Kremlin hace un año para un tercer mandato como presidente, después de los de 2000-2008 y otro como primer ministro entre 2008 y 2012, Putin prometió un rearme "sin precedentes" de Rusia frente a Estados Unidos al que pretende destinar 590.000 millones de euros en esta década.
Desfiles militares en los que participaron cerca de 40.000 soldados tuvieron lugar en 24 grandes ciudades de Rusia, desde Vladivostok (Extremo Oriente) hasta San Petersburgo (noroeste), pasando por Siberia.
En Moscú, numerosos regimientos del ejército ruso desfilaron al ritmo de la música, seguidos de rampas de lanzamiento móviles de misiles tierra-aire perfeccionadas S-400.
Estos vehículos atravesaron el centro de la capital bajo la mirada de los numerosos espectadores que se dieron cita tras las vallas metálicas situadas a lo largo de un itinerario acordonado por las fuerzas de seguridad.
En el cielo, 68 helicópteros y aviones, entre los que había bombarderos estratégicos Tupolev-160 y cazas MiG-29, sobrevolaron Moscú.
Más de 25 millones de soviéticos murieron durante la Segunda Guerra Mundial. Los responsables rusos acusan con frecuencia a la historiografía occidental de minimizar el papel de la URSS en la victoria occidental.
Las celebraciones de "la Gran Guerra patriótica" en Rusia, que generalmente no prestan mucha atención al desembarco aliado en Europa, incluyen actividades, como conciertos, exposiciones o proyección de películas, durante todo el día.
La conmemoración finalizará por la noche con fuegos artificiales y el disparo de 18 cañonazos en Moscú.