La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, puso hoy en funciones a su nuevo ministro de Relaciones Exteriores, Luiz Alberto Figueiredo, y reafirmó que la relación con los países de América Latina representa "la mayor prioridad" para su Gobierno.
Figueiredo asumió el cargo que desde el 1 de enero de 2011 ocupaba Antonio Patriota, quien renunció el pasado lunes después de que el senador opositor boliviano Roger Pinto llegó a Brasil con la complicidad de funcionarios diplomáticos y sin el salvoconducto que necesitaba del Gobierno del presidente de Bolivia, Evo Morales.
Rousseff no hizo ninguna alusión a ese episodio, que ha generado una seria crisis diplomática con Bolivia, pero aseguró que "a los hermanos latinoamericanos", Brasil "siempre les debe dar lo mejor".
Brasil es la sexta economía mundial y la primera de América Latina.
Según Rousseff, América Latina "ya fue una especie de área de riesgo para la democracia", estuvo "marcada por dictaduras cruentas y duraderas", pero "vive hoy un estado de modernización política, en un mundo lleno de conflictos étnicos y religiosos".
La jefa de Estado afirmó que Brasil "se enorgullece de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (Celac)", mecanismos que consideró "fundamentales para el crecimiento económico y el fortalecimiento de las instituciones democráticas".
Sobre su nuevo canciller, la presidenta valoró su "notable experiencia" de más de treinta años en el servicio exterior, su "capacidad negociadora" y su conocimiento sobre asuntos del medio ambiente, que "son una bandera de Brasil" y en los que se ha especializado.
Según Rousseff, "el desarrollo sustentable es un compromiso necesario y urgente" para Brasil, un país que además "persigue el establecimiento de prácticas de relaciones comerciales justas y éticas" y el multilateralismo.
Al despedirse de Patriota, declaró que "Brasil no podía prescindir de su experiencia y conocimientos", por lo que ratificó que ha sido designado como nuevo embajador del país ante la ONU, cargo en el que reemplazará precisamente a Figueiredo.
En el acto de toma de posesión del cargo, el nuevo canciller hizo un muy breve discurso, en el que se volcó en elogios a Patriota y se comprometió a dar "continuidad" a su trabajo.
EFE
