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miércoles, 30 de octubre de 2013

Otra noche de violencia y furia copó las calles de San Pablo

San Pablo fue escenario nuevamente de violentas protestas en las calles que dejaron una persona herida de bala, unos 90 detenidos y al menos ocho vehículos incendiados, en rechazo al asesinato de un joven de 17 años cometido por policías.
Los manifestantes interrumpieron el tránsito en la ruta Fernao Dias, donde un hombre resultó herido de bala e incendiaron al menos cuatro camiones y cuatro colectivos, además de abordar un camión con el cual recorrieron el lugar, según informó la cadena Globo.
"Durante el saqueo a un negocio, algunos participantes de la protesta llevaban armas de fuego y efectuaron disparos. Un transeúnte recibió un tiro y fue auxiliado y llevado al hospital", dijo la Policía Militar de Sao Paulo en un comunicado enviado a la agencia Afp.
"Seis ómnibus y tres camiones fueron incendiados y hubo saqueos a negocios (...) Aproximadamente 90 personas fueron detenidas", añadieron.
Los manifestantes cerraron el tránsito y obligaron a descender a los choferes, para luego prender fuego a sus vehículos. Conductores de otras unidades que notaban la situación, realizaban peligrosas maniobras para girar contramano en el tránsito y huir por la misma vía.
La protesta de ayer, que se suma a la ola de violencia que se viene registrando en las últimas semanas en las calles de San Pablo en rechazo al precio del transporte, se originó tras la muerte de Douglas Martin Rodrigues, de 17 años, quien murió tras recibir un disparo policial. Al parecer, el joven estaba desarmado y no ofreció resistencia, en Vila Medeiros, un barrio pobre del norte de San Pablo.
La muerte de Rodrigues originó una serie de protestas el domingo por la noche, cuando la policía lanzó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, pero las protestas se reiteraron anoche aparentemente con más violencia.
"Lamentablemente tuvimos un joven que murió víctima de una acción policial, el policía ya está preso y la sanción será rigurosa", declaró hoy el gobernador paulista, Geraldo Alckmin.
"Fue un crimen, no fue un accidente... quiero que el gobernador (Geraldo) Alckmin haga algo", declaró la madre de Douglas Martin Rodrigues. Por su parte, la Policía Militarizada informó que el disparo "fue accidental".
AGENCIA