Las autoridades sanitarias de los países europeos discuten en Roma los desafíos que plantea en materia de salud el flujo sin precedentes de refugiados que llega a ese continente.
En una reunión de dos días auspiciada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el gobierno de Italia, los ministros y otros representantes de los gobiernos buscarán una estrategia común y coordinada para atender las necesidades sanitarias de los refugiados.
Según la ONU, este año han llegado 700.000 refugiados a Europa y dos millones a Turquía. El 5% de ese colectivo precisa asistencia médica debido a heridas accidentales, hipotermia, quemaduras, problemas cardiovasculares, embarazos y partos, diabetes e hipertensión.
La directora regional para Europa de la OMS, Zsuzsanna Jakab, explicó que los sistemas de sanitarios europeos están bien equipados para diagnosticar y tratar las enfermedades comunes y no contagiosas.
"Sin embargo, como región, debemos garantizar que todos los países estén preparados y organizados para lidiar con la presión adicional de asistir a la gente que llega sin descuidar la salud de la población residente", dijo.