La división mediática del Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés), integrada por los camarógrafos, fotógrafos y editores, es la mejor pagada, aún por encima de los encargados de cometer atentados y de decapitar prisioneros.
Según relataron los condenados, los cientos de reclutas -principalmente extranjeros-, pasan dos meses de entrenamiento militar y uno de entrenamiento en los medios de comunicación.
Quienes aprueban para la división mediática del Estado Islámico reciben un salario mensual de unos US$ 700 y el resto de los milicianos, en cambio, reciben una paga de US$ 100 por mes.
Tienen "pasaporte" yihadista
Además, estos productores de videos reciben un equipo traído de Turquía que incluye una cámara de fotos Canon y un smartphone Samsung Galaxy.
Se trasladan a diversos puntos de territorios bajo control de ISIS en Irak y Siria, y allí filman decapitaciones, fusilamientos o mensajes amenazantes. Las tomas son colocadas en un disco duro y enviadas a alguna de las 36 oficinas donde otro grupo se ocupa de compilar y editar los videos.
Abu Hajer al Maghribi, uno de los presos en Marruecos, contó al Washington Post que recibió una especie de “pasaporte” con el logo de ISIS, con el cual pasaba los controles yihadistas y así podía trasladarse a las locaciones que le asignaban.
El terrorista dijo que, entre otros encargos, filmó una ejecución masiva de soldados sirios en Taqba desde la ventana de su auto en movimiento, para obtener una imagen panorámica. "No quieres hacerlo, pero sabes que no es posible decir que no", indicó al diario estadounidense.EFE