(Barcelona, 26 de mayo. EFE).- El internacional argentino del FC Barcelona Lionel Messi declarará el próximo 2 de junio al final del juicio que se celebrará en su contra por evasión de impuestos en la Audiencia de Barcelona, en el que le estará permitido no acudir a las dos primeras sesiones, ya que afronta una petición inferior a los dos años de cárcel.
La Audiencia de Barcelona juzgará a partir del próximo 31 de mayo al astro argentino, que se sentará junto a su padre y representante, Jorge Horacio Messi, en el banquillo de los acusados, por tres delitos contra la Hacienda española,
El delantero azulgrana afronta una solicitud de 22 meses de cárcel por parte de la Abogacía del Estado, ya que en su caso la Fiscalía no ha presentado cargos en su contra, a diferencia de lo que ocurre con su padre, para quien el ministerio público pide 18 meses de prisión.
Según ha informado hoy el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el juicio se iniciará el martes 31 de mayo con las cuestiones previas y la declaración de los testigos, proseguirá el miércoles 1 de junio con la intervención de más testigos y de los peritos, mientras que la declaración de los Messi se reserva para el final del juicio, el 2 de junio.
Tras la declaración de Messi y de su padre, será el turno para los informes finales, ante lo que el tribunal ha reservado también el día 3 de junio, por si fuera necesario al alargarse el proceso.
En su escrito de acusación, la Fiscalía solicita 18 meses de prisión para el padre del futbolista por evadir 4,1 millones de euros en impuestos la Hacienda española, pero pide el archivo de la causa para Lionel Messi, contra el que inicialmente se querelló, al entender que no tuvo conocimiento del fraude.
De hecho, la Fiscalía se querelló inicialmente por fraude fiscal contra Messi y su padre y representante, Jorge Horacio, pero meses más tarde pidió el archivo de la causa para el futbolista, después de que ambos pagaran al juzgado 5 millones de euros, que incluían la suma defraudada más los intereses.
El padre de Messi asumió ante la juez toda la responsabilidad en la gestión tributaria de su hijo, pero la instructora acordó mantener al futbolista imputado en la causa, en una decisión que después respaldó la Audiencia de Barcelona.
El futbolista será finalmente juzgado dado que la Abogacía del Estado mantiene la acusación contra él y le pide, igual que a su padre, una condena de 22 meses de prisión por tres delitos contra la Hacienda pública.
Al afrontar una petición inferior a los dos años de cárcel, el astro azulgrana no está obligado a asistir a todas las sesiones del juicio, ya que así lo recoge la ley, a excepción del día que declara.
De hecho, la ley establece que el acusado que afronta una pena inferior a los dos años no tiene ni que informar sobre qué días asistirá al juicio, por lo que, hasta el mismo día, tanto el 31 de mayo como el 1 de junio, no se sabrá si Messi acude al juicio antes de su declaración.