El equipo de especialistas médicos visitó tres remotos pueblos Yanomami en la selva amazónica y confirmó en sus entrevistas con los pobladores que 17 personas, entre ellos niños, murieron al parecer afectados por la malaria en los últimos tres meses, dijo la noche del martes el doctor Miguel Hernández, director regional de salud del estado Amazonas.
Dos auxiliares médico indígenas que visitaron la zona reportaron la semana pasada que de acuerdo con los jefes de las aldeas, alrededor de 50 personas murieron recientemente.
Hernández, sin embargo, señaló en una entrevista telefónica que un estudio a fondo confirmó una cifra más baja. Indicó que una de las víctimas falleció durante la visita de los médicos que se prolongó cinco días a finales de octubre.
La misión médica administró medicamentos contra la malaria a la mayoría de las 150 personas que viven en las tres aldeas, y los funcionarios confirmaron 60 casos de esa afección entre los 91 pacientes que fueron tratados por enfermedades que van desde diarreas hasta infecciones respiratorias, acotó Hernández en un comunicado.
Agregó que una visita de seguimiento en helicóptero está prevista este mes y que en los próximos días los funcionarios de salud también se trasladarán a distintas zonas remotas para chequear la situación en otras comunidades.
Los Yanomami, una de las etnias indígenas más aisladas en la Amazonia, han sufrido regularmente de malaria, y la información sobre brotes a menudo son difíciles de confirmar porque muchas aldeas sólo tienen contactos esporádicos con el mundo exterior.
Los trabajadores yanomami de la salud, Andrés Blanco y Shatiwe Luis Ahiwei, que inicialmente informaron la cifra de muertos más alta, no pudieron ser inmediatamente contactados para hacer un comentario.
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