En ese sentido aconsejó que antes de comprar un juguete se debe observar si cuenta con la correspondiente etiqueta con información básica como la autorización sanitaria, el registro nacional o del importador y que cumplan con las especificaciones del producto en el rotulado.
“El cumplimiento de estos requisitos es indispensable para garantizar que el producto a adquirir es el más conveniente”, señaló Crisólogo Cáceres, presidente de Aspec. Afirmó que, pese a las campañas realizadas en años anteriores, en el mercado se siguen comercializando una serie de juguetes peligrosos.
“Un artículo de este tipo puede ser peligroso si es que para ello se emplean sustancias tóxicas como los que son cubiertos con pinturas elaboradas con metales pesados como el plomo, cadmio, níquel, mercurio y otros”, dijo Cáceres.
En cuanto a los juguetes peligrosos por su diseño mencionó que son aquellos que por su forma pueden ocasionar daños físicos inmediatos a quien los manipula. Tal es el caso de las espadas y cuchillos afilados, las pistolas y rifles que disparan balas a presión, y los juguetes con piezas demasiado pequeñas.
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