La Federación Española de Baloncesto (FEB) tendrá que pagar cinco veces más por asegurar a los jugadores de la NBA con los que contará Sergio Scariolo para competir en el próximo Europeo, del 31 de agosto al 18 de septiembre en Lituania. Esa es una de las numerosas consecuencias del cierre patronal decretado por los clubes de la NBA, tras no haber logrado un acuerdo con el sindicato de jugadores. El cierre supone que los contratos quedan suspendidos, los jugadores no cobran y pierden los derechos del seguro médico que costean sus clubes.
La cesión de los jugadores de la NBA a sus selecciones está regulada por un convenio entre la propia NBA y la Federación Internacional (FIBA). Gracias a ello, los seguros no son muy caros. En el caso de España, se calculaba que la FEB habría tenido que pagar 100.000 euros por contar con Calderón, Ricky Rubio, Rudy Fernández, Pau y Marc Gasol y, una vez que obtenga la doble nacionalidad, Serge Ibaka. Tras el cierre en la NBA, la FEB tendrá que abonar medio millón de euros por asegurar a dichos jugadores.
La FIBA ha comunicado a las federaciones la nueva situación. Patrick Baumann, secretario general de la FIBA, manifiesta: "Esperamos que el conflicto se solucione con rapidez, pero sobre todo que no afecte a las selecciones que buscarán este verano su clasificación para los próximos Juegos Olímpicos". Algunas federaciones pueden tener problemas para financiar el incremento de los seguros. "Buscaremos los fondos adicionales a través del Gobierno o de algún patrocinador ya que, teniendo en cuenta que contamos seis jugadores de la NBA, la suma es considerable", asegura el presidente de la Federación Francesa, Jean-Pierre Siutat.
El cierre patronal sitúa a los jugadores en una encrucijada. Muchos de ellos consideran la posibilidad de jugar en equipos fuera de la órbita de la NBA. Pero corren un grave riesgo porque, si se lesionan, una vez que concluya el cierre sus clubes podrían denunciar sus contratos. Cuanto más alto sea el contrato, mayor es el riesgo que asumen los jugadores. Parece difícil que las figuras se decidan a fichar por equipos europeos. "Está todo en el aire. Debemos informarnos sobre hasta cuándo puede durar este conflicto para planear nuestra temporada. Si vuelvo a Europa, España sería mi primera opción, pero no la única. China, por ejemplo, es muy potente, hay gran afición al baloncesto y la alternativa de montar ahí algo, pero es hipotético", manifestó Pau Gasol en TVE. "El planteamiento de volver existe, pero es difícil regresar para jugar solo unos meses e injusto para ese equipo que apuesta e invierte. Claro que no me gustaría pasar un año en blanco. Me parecería extrañísimo que se suspendiera la temporada entera debido al buen momento que atraviesa la NBA en general", concluyó el pívot de los Lakers, que el próximo miércoles cumple 31 años.
En Alemania, Uli Höness, el presidente del Bayern Múnich, club que intenta potenciar el baloncesto, salió al paso de los rumores que aseguraban que trata de fichar a Dirk Nowitzki, el alemán campeón de la NBA con Dallas. Otros jugadores con menos cartel como Radmanovic y Songaila sí parecen decididos a seguir los pasos de Krstic, el pívot de los Celtics, que ha fichado por el CSKA de Moscú. Los jugadores, con su presidente Derek Fisher, base de los Lakers al frente, dicen estar preparados para un conflicto de larga duración.
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