El huracán Eugene, que había cobrado fuerza los dos últimos días en el Pacífico, alcanzando la intensidad de categoría cuatro, se convirtió este viernes en una tormenta tropical y se mantiene lejos de las costas de México, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) en Miami.
"Eugene ya no es un huracán", indicó el reporte del NHC a las 15H00 GMT.
Los vientos máximos sostenidos de este ciclón bajaron a 100 km/h con algunas ráfagas fuertes y según los meteorólogos se disipará del todo hacia el domingo.
La tormenta se ubicaba el viernes en la mañana a unos 1.500 km al oeste del sur de la península de Baja California (México).
El miércoles, la fuerza de los vientos hizo de Eugene un huracán de categoría cuatro en la escala de cinco de Saffir-Simpson.
No fueron emitidos avisos ni alertas en ninguna región, y tal como presagiaron los meteorólogos Eugene se debilitó al avanzar hacia aguas cada vez más frías.
