La policía de Sydney actualmente intenta desactivar un collar bomba que ha sido hallado atado a una joven de 18 años perteneciente a una familia adinerada de la zona.
La joven, residente del barrio de Mosman, llamó a la policía la mañana del miércoles pidiendo ayuda. Un equipo de oficiales se ha trasladado hasta la casa, donde “examinan el artefacto” e intentan ayudar a la mujer.
Un alto cargo de la policía oficial informó al periódico ‘Australia’s Daily Telegraph’ que se trataba de un extraño “collar bomba”. Mark Murdoch, subcomisario, explicó a los medios de comunicación australianos que la joven no podía quitarse el artefacto explosivo.
“El proceso necesita un alto nivel de destreza y debe ser meticuloso”, ha explicado Murdoch, que no pudo precisar si era verdad la información que alega que el artefacto fue atado a la mujer por alguien que ella no conocía, y que se podría tratar de un intento de extorsión.
El subcomisario se limitó a precisar que el incidente “no se está tratando como un caso de autolesión”, según informa ‘The Telegraph’.
La australiana, que forma parte de una de las familias más ricas de Sydney, dice estar “petrificado” por lo ocurrido. El barrio de Mosman, donde reside, está repleta de viviendas de familias adineradas. Como precaución la policía ha cortado el paso de varias carreteras cercanas y tienen equipos médicos y a los bomberos en alerta.
Vía El Mundo.es