Caracas solía ser una de las ciudades con más vida nocturna de Latinoamérica, salir a tomarse un trago luego del trabajo era lo habitual, pero gracias a la ola de violencia generalizada y a la inseguridad, los venezolanos tienen miedo de salir de sus casas luego de las 6 de la tarde.
Según un artículo publicado en el Diario 2001, algunos expertos aseguran que Caracas perdió su vida nocturna.
Alfredo Cliento, profesor e investigador del Instituto de Desarrollo Experimental de la Construcción de la UCV, afirma que “la violencia le quitó a los habitantes la capacidad de disfrutar de la ciudad. Se ha perdido la oportunidad de crear empleos, incentivar el turismo y generar espacios recreativos para las personas como sucede en otros países”.