El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha atribuido la fuerte subida que ha registrado la prima de riesgo española al "nerviosismo" y la "volatilidad" que generan en los mercados las "dudas sobre el crecimiento en Europa". Además, frente al recrudecimiento de las turbulencias y al repunte de las dudas sobre España, Guindos ha asegurado que "la receta está clara: continuar con la agenda de consolidación fiscal y la agenda de las reformas que, como la laboral o la del sector financiero sentarán las bases del crecimiento futuro".
"Tiene que ver con las dudas del crecimiento económico en Europa. Si no hay crecimiento económico, los mercados empiezan a dudar", ha dicho el ministro en referencia a la evolución de la prima de riesgo española, que hoy ha superado por primera vez en lo que va de año los 400 puntos. Las reformas que se han hecho y las que están por venir, ha defendido el ministro, "van a ser la mayor fuente de confianza" en España.
El diferencial del bono español está en niveles del pasado noviembre, cuando las convulsiones financieras acentuaron los temores de que España e Italia podrían acabar siendo contagiados por la crisis de la deuda soberana de Grecia. El Banco Central Europeo (BCE) tomó cartas en el asunto y puso en marcha dos programas de préstamos a tres años y a un 1% de interés, que en diciembre y en febrero inyectaron liquidez por importe de un billón de euros a la banca europea.
Las entidades españolas e italianas participaron activamente en ambas subastas y usaron los fondos para atender sus propios vencimientos y para adquirir títulos de deuda pública (españoles e italianos, principalmente) y obtener un margen (operación que se conoce como carry trade).
Pero el efecto de este balón de oxígeno parece estarse desvaneciendo y quedan al desnudo, como ayer señaló el presidente del BCE, Mario Draghi, "los fundamentos económicos" de unas economías que aún tienen "cumplir" con las reformas anunciadas.
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