El diseñador español Adolfo Domínguez inauguró la segunda edición de Lima Fashion Week (LIF Week), que se desarrolla como parte de la Semana Perú Moda, con una colección inspirada en la década de los cincuenta, que resalta la silueta femenina y le da un aire relajado a la masculina.
Domínguez, quien tiene dos boutiques en Lima, se mostró muy contento de participar en una pasarela tan joven como la de LIF Week y afirmó, además, que en Latinoamérica se siente como en casa.
"En mujer se recupera una silueta de los años 50, no muy estrecha, más bien fluida y pegada al cuerpo, y abajo evasé (acampanado). El vestido es el tema fundamental, es la estrella en la colección de mujer", señaló Domínguez a Efe.
Una paleta de colores suaves, escotes pronunciados, vestidos vaporosos, transparencias, estampados de libélulas y formas delicadas y elegantes marcaron el hilo de la colección del español, contemplada a sala llena por cientos de espectadores.
El diseñador gallego precisó que esa colección primavera verano la presentó antes en la Semana Internacional de la Moda de Madrid, y la quiso mostrar en Lima porque "uno normalmente desfila donde va abriendo tiendas".
El costurero dijo que busca expandirse a mercados como los de Latinoamérica y Asia porque la situación en su país es "complicada".
"En España las cosas están tan complicadas que realmente los empresarios lo que tenemos que hacer es crecer en el exterior, y comenzar lo que empezamos allí y llegar a un punto en que nuestra pata esté del otro lado. Que España sea una parte de lo que vendes pero no lo más importante", declaró.
Domínguez manifestó la gran atracción que siente por la plaza peruana debido a su crecimiento económico y relató a Efe que tiene previsto inaugurar en Lima una tercera tienda para junio y una cuarta para fines de año, además de que "hay unas cuantas más en el próximo futuro".
Pese a la crisis económica que viven muchos países, Domínguez sostiene que "en cada ciudad hay una inmensa minoría" a la que viste, un eslogan que resume la fidelidad a su exclusiva marca.
Además, el diseñador destacó que tampoco está dispuesto a sacrificar el compromiso de su empresa "identificada con valores y prácticas ecológicas", por lo que sigue utilizando algodón y lino orgánico, fibras de alpaca, entre otros materiales.
"El costo es un poco superior, sí, pero son una serie de cosas a las que te comprometes. Nosotros tenemos un compromiso, por ejemplo, de no usar pieles", resaltó.
Con una carrera de casi cuarenta años, 704 locales en Europa, Asia y América y un estilo que no cree en lo efímero y aspira a ser eterno, Domínguez le pone mucho cuidado a su trabajo y siente una gran responsabilidad por él.
"No solo es diseñar en abstracto, sino estar muy pendiente de lo que la gente quiere", opinó.
Hasta el sábado 28 el LIF Week contará con los desfiles de los diseñadores peruanos Sitka Semsch, Fátima Arrieta, Edward Venero, Gerardo Privat, Claudia Jiménez, Andrea Llosa, Sumy Kujón, Ana María Giulfo, Noe Bernacelli, Ani Álvarez Calderón y Jorge Luis Salinas; además de la presentación de las marcas Kuna, Ilaria y Jimena Mujica.
También como parte de la Semana Perú Moda habrá una feria internacional especializada en confecciones, joyería, calzado y accesorios, otra de artículos de regalo y decoración y un foro textil exportador.
"En mujer se recupera una silueta de los años 50, no muy estrecha, más bien fluida y pegada al cuerpo, y abajo evasé (acampanado). El vestido es el tema fundamental, es la estrella en la colección de mujer", señaló Domínguez a Efe.
Una paleta de colores suaves, escotes pronunciados, vestidos vaporosos, transparencias, estampados de libélulas y formas delicadas y elegantes marcaron el hilo de la colección del español, contemplada a sala llena por cientos de espectadores.
El diseñador gallego precisó que esa colección primavera verano la presentó antes en la Semana Internacional de la Moda de Madrid, y la quiso mostrar en Lima porque "uno normalmente desfila donde va abriendo tiendas".
El costurero dijo que busca expandirse a mercados como los de Latinoamérica y Asia porque la situación en su país es "complicada".
"En España las cosas están tan complicadas que realmente los empresarios lo que tenemos que hacer es crecer en el exterior, y comenzar lo que empezamos allí y llegar a un punto en que nuestra pata esté del otro lado. Que España sea una parte de lo que vendes pero no lo más importante", declaró.
Domínguez manifestó la gran atracción que siente por la plaza peruana debido a su crecimiento económico y relató a Efe que tiene previsto inaugurar en Lima una tercera tienda para junio y una cuarta para fines de año, además de que "hay unas cuantas más en el próximo futuro".
Pese a la crisis económica que viven muchos países, Domínguez sostiene que "en cada ciudad hay una inmensa minoría" a la que viste, un eslogan que resume la fidelidad a su exclusiva marca.
Además, el diseñador destacó que tampoco está dispuesto a sacrificar el compromiso de su empresa "identificada con valores y prácticas ecológicas", por lo que sigue utilizando algodón y lino orgánico, fibras de alpaca, entre otros materiales.
"El costo es un poco superior, sí, pero son una serie de cosas a las que te comprometes. Nosotros tenemos un compromiso, por ejemplo, de no usar pieles", resaltó.
Con una carrera de casi cuarenta años, 704 locales en Europa, Asia y América y un estilo que no cree en lo efímero y aspira a ser eterno, Domínguez le pone mucho cuidado a su trabajo y siente una gran responsabilidad por él.
"No solo es diseñar en abstracto, sino estar muy pendiente de lo que la gente quiere", opinó.
Hasta el sábado 28 el LIF Week contará con los desfiles de los diseñadores peruanos Sitka Semsch, Fátima Arrieta, Edward Venero, Gerardo Privat, Claudia Jiménez, Andrea Llosa, Sumy Kujón, Ana María Giulfo, Noe Bernacelli, Ani Álvarez Calderón y Jorge Luis Salinas; además de la presentación de las marcas Kuna, Ilaria y Jimena Mujica.
También como parte de la Semana Perú Moda habrá una feria internacional especializada en confecciones, joyería, calzado y accesorios, otra de artículos de regalo y decoración y un foro textil exportador.
EFE