Los paleontólogos que excavan desde hace cinco años el barranco de La Boella en La Canonja ha descubierto los restos óseos de un mamut, datados hace 700 mil años, según informó hoy el responsable de la excavación, Josep Vallverdú.
“En concreto, se han encontrado en el yacimiento del Forn restos de una tibia, de una costilla y un hueso articular de un mamut meridional de 700.000 años de antigüedad, así como muchos otros restos de diferentes animales como cérvidos, caballos, hipopótamos y fragmentos dentarios de una hiena”, en este caso de 200.000 años, añade Valverdú.
También se han encontrado restos de piedra tallada y herramientas fabricadas en sílex por humanos. A su juicio con estos descubrimientos, La Boella esta “a la altura de otros yacimientos como Atapuerca u Orce en cuanto a excavaciones europeas para obtener documentos de relevancia que puedan explicar las migraciones humanas y la evolución de las especies”.
Para Vallverdú, los restos de La Boella, un proyecto que podría demorar hasta 20 años, son importantes para explicar “la teoría de la evolución, la geología de la cuenca del río Francolí y los diferentes ecosistemas”. El científico del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) ha apuntado que el próximo verano publicarán en las principales revistas internacionales un estudio donde probarán que por La Boella ”pasó una segunda migración procedente de África hace 1,8 millones de años”, lo que convertirá a este yacimiento “en un referente”.
Con información de La Vanguardia