Al menos 16 personas murieron y 14 resultaron heridas hoy en el bombardeo efectuado por un avión espía de EEUU en la zona tribal de Orakzai, en el noroeste de Pakistán, informó a Efe una fuente oficial.
El ataque se produjo a las 16.00 hora local (11.00 GMT) en una zona fronteriza con el área de Waziristán del Norte, dijo desde Peshawar, la principal ciudad del conflictivo noroeste del país, un funcionario de las Áreas tribales administradas en forma federal.
Según detalló el canal de televisión local Geo, sin revelar sus fuentes, el avión no tripulado lanzó cuatro misiles en la zona de Bulandkhel contra un centro religioso frecuentado por simpatizantes de la facción talibana conocida como red Haqqani.
Orakzai y Waziristán del Norte son dos de las siete demarcaciones que forman el cinturón tribal paquistaní fronterizo con Afganistán y este año ya se han registrado allí alrededor de treinta bombardeos con un número de muertos que se acerca a las 150 personas.
Esta región tribal nunca ha estado bajo completo dominio del Estado y sirve de refugio a numerosas grupos yihadistas, miembros de la red Al Qaeda o talibanes que actúan contra las tropas aliadas en Afganistán.
Desde su llegada al poder, el actual presidente estadounidense, Barack Obama, aumentó la frecuencia de estas operaciones como parte de su estrategia para encontrar una salida al conflicto afgano, en el que Pakistán tiene un papel clave.
Sin embargo, cada vez son más las voces dentro y fuera del país asiático que protestan contra una táctica que contraviene la legislación internacional y que, según sectores sociales y políticos paquistaníes, cuesta la vida a numerosos civiles inocentes.
El ataque se produjo a las 16.00 hora local (11.00 GMT) en una zona fronteriza con el área de Waziristán del Norte, dijo desde Peshawar, la principal ciudad del conflictivo noroeste del país, un funcionario de las Áreas tribales administradas en forma federal.
Según detalló el canal de televisión local Geo, sin revelar sus fuentes, el avión no tripulado lanzó cuatro misiles en la zona de Bulandkhel contra un centro religioso frecuentado por simpatizantes de la facción talibana conocida como red Haqqani.
Orakzai y Waziristán del Norte son dos de las siete demarcaciones que forman el cinturón tribal paquistaní fronterizo con Afganistán y este año ya se han registrado allí alrededor de treinta bombardeos con un número de muertos que se acerca a las 150 personas.
Esta región tribal nunca ha estado bajo completo dominio del Estado y sirve de refugio a numerosas grupos yihadistas, miembros de la red Al Qaeda o talibanes que actúan contra las tropas aliadas en Afganistán.
Desde su llegada al poder, el actual presidente estadounidense, Barack Obama, aumentó la frecuencia de estas operaciones como parte de su estrategia para encontrar una salida al conflicto afgano, en el que Pakistán tiene un papel clave.
Sin embargo, cada vez son más las voces dentro y fuera del país asiático que protestan contra una táctica que contraviene la legislación internacional y que, según sectores sociales y políticos paquistaníes, cuesta la vida a numerosos civiles inocentes.
EFE