Los precios del petróleo podrían retroceder gradualmente en los próximos cinco años debido a una desaceleración del crecimiento económico, la creciente eficiencia energética y el fuerte incremento en la producción en Irak y Norteamérica, dijo el viernes el organismo occidental supervisor de la energía.
La Agencia Internacional de la Energía (AIE), que asesora a países industrializados sobre política energética, recortó su proyección del crecimiento de la demanda global de petróleo para el 2011-2016 en 500.000 barriles por día (bpd) frente a su informe anterior de diciembre del 2011.
Como resultado, la presión sobre la OPEP para que produzca más petróleo disminuirá dramáticamente y la organización tendrá que recortar el bombeo a no más de 31 millones de bpd hasta el 2017 para balancear la demanda global. El grupo ha estado produciendo entre 31 y 32 millones de bpd este año.
"Las expectativas de crecimiento económico durante el período del pronóstico se han reducido en medio de preocupaciones persistentes sobre el endeudamiento de la OCDE, especialmente en la zona euro. Incluso China, el principal motor del crecimiento de la demanda en la última década, está mostrando señales de desaceleración", dijo la AIE en su Informe del Mercado Petrolero a Mediano Plazo.
"Las mediciones sugieren un alivio gradual de los precios durante el período del pronóstico", dijo el informe.
Los precios del crudo Brent en Londres cayeron tras el informe de la AIE, cotizando con una merma de más de un dólar por barril, por debajo de los 115 dólares.
En su informe anterior de diciembre del 2011, la AIE dijo que esperaba un incremento en la demanda global de petróleo de alrededor de 8 por ciento entre el 2010 y el 2016, pero preveía que los mercados pasarían a estar menos ajustados que en años anteriores.
Diez meses después, presentó un panorama aun más cómodo, asegurando que la demanda de petróleo subirá menos de 7 por ciento entre este año y el 2017, cuando alcanzará a 95,7 millones de bpd.
NUEVOS FLUJOS
"El panorama de la demanda parece más moderado, mientras que el poder de transformación de las tecnologías no convencionales de producción de petróleo aplicadas en formaciones de esquisto en Norteamérica supera las expectativas iniciales", dijo el informe.
El año pasado, la AIE dijo que la producción estadounidense de petróleo ligero desde formaciones de esquisto marcaba "un antes y después en el desarrollo". Este año aseguró que el impacto de las nuevas variedades de petróleo está aumentando.
La capacidad de producción global subiría 9,3 millones de bpd al 2017 a 102 millones de bpd, superando de hecho a la demanda en más de 6 por ciento.
"Alrededor de 20 por ciento del crecimiento de los líquidos proviene de la capacidad iraquí y el 40 por ciento de la producción norteamericana en arenas bituminosas o de la producción de petróleo ligero de formaciones de esquisto" dijo la AIE.
La OPEP también hará fuertes gastos para elevar su capacidad ociosa, que se duplicaría con creces a 5 a 7 millones de bpd, un nivel sin precedentes desde antes del período 2003-2008 de precios altos del crudo.
La capacidad ociosa de la OPEP es considerada el principal colchón contra interrupciones del suministro y las preocupaciones sobre la decreciente capacidad han sido una de las principales razones detrás de las alzas recientes del precio del crudo.
DESPLOME DE PRODUCCION IRANI
La agencia dijo que había una incertidumbre excepcional sobre la economía global y la intensificación de riesgos geopolíticos regionales.
"La serie de interrupciones del suministro del año pasado en Siria, Yemen, Sudán, el Mar del Norte, Brasil y el Golfo de México, ilustraron la posibilidad de una "tormenta perfecta" de interrupciones coincidentes en muchas regiones petroleras", dijo el informe.
"Incluso las interrupciones que ocurrieron, sin embargo, palidecen en comparación a la nueva amenaza de malestar y conflictividad política que se difunde en el corazón de la región productora de Oriente Medio", agregó el informe.
Los precios del petróleo se acercaron a los 130 dólares el barril durante el año, cerca de sus máximos del 2008 de 147 dólares por barril, debido a preocupaciones sobre interrupciones del suministro de Irán.
Estados Unidos y la Unión Europea impusieron nuevas sanciones económicas más duras contra Irán este año, en respuesta a su programa nuclear, perjudicando el acceso de Irán a algunos mercados de exportación.
Israel y Estados Unidos también dijeron que se reservan el derecho de utilizar la fuerza, si es necesario, para evitar que Irán obtenga un arma nuclear. Irán dice que su programa nuclear es pacífico.
"La situación permanece muy impredecible y la sostenibilidad de las sanciones a más largo plazo evidentemente no está comprobada" dijo la AIE.
El año pasado, la AIE dijo que las sanciones más severas contra la exportación de equipos petroleros a Irán podría resultar en una disminución de su capacidad de producción en casi un cuarto, a menos de 3 millones de bpd, para 2016.
Diez meses después, Irán ya produce menos de 3 millones de bpd, al tiempo que las sanciones de Occidente sofocan sus exportaciones.
La AIE dijo en otro informe mensual publicado el viernes sobre petróleo que estimaba que la producción de crudo iraní había disminuido 220,000 bpd en septiembre a un nuevo mínimo en varias décadas de 2,63 millones de bpd.
El organismo estimó que las exportaciones iraníes de petróleo en septiembre cayeron a 860.000 bpd frente a alrededor de 2,2 millones de bpd en 2011. La caída de las exportaciones llevó a una fuerte disminución de ingresos y a choques en las calles de Teherán mientras se desmoronaba la moneda local.
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