El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se ha mostrado conmovido por el elevado número de jóvenes que murieron en el incendio que destruyó en la madrugada del domingo una discoteca en el sur de Brasil y en el que perecieron 231 personas.
Según una nota divulgada hoy por la oficina de prensa de la ONU en Río de Janeiro, "el secretario general se entristeció al saber del trágico incendio que ocurrió en la ciudad de Santa María, en Brasil. Él se conmovió especialmente con el gran número de jóvenes, entre ellos estudiantes universitarios, que falleció a causa del fuego".
Ban Ki-moon manifestó a través de ese texto sus condolencias a las familias y amigos de las víctimas, así como al gobierno y al pueblo brasileño.
Casi todos los fallecidos eran estudiantes de diferentes facultades la Universidad Federal de Santa María, de entre 18 y 30 años, que participaban en una fiesta en la discoteca Kiss.
Los 112 heridos también son jóvenes universitarios.
EFE