El senador republicano Lindsey Graham afirmó que los ataques con aviones no tripulados estadounidenses o "drones" han matado a unas 4.700 personas (entre ellas cientos de civiles), una cifra que supera algunas estimaciones independientes.
"En algunos casos perdieron la vida personas inocentes, y eso no me gusta, pero estamos en guerra, y hemos acabado con algunos miembros de alto nivel de Al Qaeda", indicó.
Sin embargo, Graham defendió el uso que hace la administración del presidente Barack Obama de aviones no tripulados para realizar ataques en el extranjero, sosteniendo que "es un arma que debe ser utilizada".
Los legisladores estadounidenses se niegan a discutir públicamente los detalles del polémico programa y la cifra real de muertos por este tipo de ataques aéreos sigue siendo un misterio.
RPP