El dirigente del
PSUV, Luis Figuera, expresó “la cohesión
y mayor organización de la maquinaría electoral del partido rojo, van a generar
una movilización más eficaz del voto militante garantizando el triunfo del
candidato Nicolás Maduro”.
En una campaña donde se enfrentan modelos
económicos opuestos, la confrontación política e ideológica está
claramente definida, y la polarización delimitada, los aparatos electorales van a ser
fundamentales.
El candidato opositor
no presenta una propuesta nueva que le permita penetrar en los sectores
tradicionalmente chavistas, sus agotadas propuestas electorales y la
incapacidad para construir un discurso alterno al modelo hegemónico bolivariano
lo imposibilitan.
El dirigente Rojo
puntualizó que en las próximas elecciones se está planteando la lucha entre un
modelo socialista que privilegia la inversión social, y una propuesta sin
nombre que no ofrece nada concreto a los electores.
Los niveles de
abstención en el antichavismo van a aumentar, porque el factor aglutinador que
era Chávez desapareció, favoreciendo a la maquinaria electoral del PSUV, que ya
venía activada y motivada porque estaba en elecciones internas.
El impacto del legado
histórico de Chávez, el reconocimiento a su obra social demostrado por más de
50 países, las muestras de dolor y
religiosidad del pueblo, van a tener un impacto reflexivo en electores clase
media tradicionalmente indecisos.
En un proceso corto
los niveles de organización y crecimiento del PSUV en los sectores
populares, donde se ubica la mayor votación, garantizan un espectro electoral
más amplio para la captación de votantes a favor de la opción representada por
Maduro.
Para finalizar el
dirigente rojo hizo un llamado al pueblo de que la única manera de mantener el plan
de la Patria creado por Chávez, es votando por Maduro, ya que la opción
opositora es una extensión de los planes neoliberales de la derecha plutocrática.