EFE-Miles de italianos visitaron hoy la Cámara de los Diputados (baja) en
una jornada de puertas abiertas a la que el Movimiento 5 Estrellas (M5S)
había llamado a participar y que llega cuando se cumple una semana de
las elecciones generales, tras las que Italia sigue sin certezas sobre
el futuro Gobierno.
El Palacio de Montecitorio de Roma abrió sus puertas durante más de cinco horas para que los ciudadanos pudieran conocer los entresijos de la Cámara Baja, donde el M5S es el partido en solitario más votado, pero en la que el centroizquierda de Pier Luigi Bersani tendrá la mayoría absoluta de diputados por ser la primera coalición en número de votos.
La representación en Roma del M5S, movimiento liderado por Beppe Grillo como iniciativa de participación ciudadana en las decisiones del país, había hecho a través de su página web un llamamiento a la población para que acudiera a su "casa", el Parlamento, este domingo.
"Hemos invitado a los ciudadanos a visitar Montecitorio para dar a conocer a todos el lugar donde entrarán los elegidos del M5S. Allí dentro entrarán los representantes de los ciudadanos y nosotros los acompañaremos hasta la puerta", afirmó Roberto, uno de los llamados "grillini" (miembros del movimiento de Grillo), en declaraciones a los periodistas.
La iniciativa de puertas abiertas de la Cámara Baja, que se repite una vez al mes, tuvo en esta ocasión una gran capacidad de convocatoria en un día soleado en Roma y contó además con una pequeña exhibición de la orquesta del Ejército italiano en la plaza en la que está el Palacio de Montecitorio.
Las colas de cientos de ciudadanos que se vieron durante toda la mañana a la entrada de la Cámara Baja indican que el flujo de visitantes fue mayor al de la media habitual, casi el triple, según señalaron fuentes de los responsables del Palacio de Montecitorio.
El llamamiento hecho por el movimiento antipolítica de Grillo a acudir al Parlamento coincide con la preparación del que será el primer encuentro de los 163 diputados y senadores electos del M5S, que se prevé que comience en las próximas horas en un lugar secreto de Roma y que tendrá mañana como su jornada más importante, con la esperada presencia de Grillo.
Este primer encuentro del grupo parlamentario del M5S a puerta cerrada es clave para este movimiento, que basa su capacidad de convocatoria en las redes sociales e Internet y que centra sus movimientos en las directrices de Grillo, un funcionamiento que algunas voces de la política tradicional ven como pseudoabsolutista.
Las decisiones que se tomen en ese encuentro, cuyo lugar y hora de celebración, según la prensa italiana, se mantiene en secreto por deseo del propio Grillo, serán vitales para el devenir del bloqueo político actual en el que está Italia tras los comicios, pues Bersani, a pesar de recibir continuas negativas del M5S, sigue empeñado en que apoyen su Gobierno.
Con una Cámara Baja con mayoría suficiente del centroizquierda, Bersani requiere de apoyos extra en el Senado, donde cuenta con 123 escaños frente a una mayoría absoluta de 158, por lo que necesita o los 117 del centroderecha de Silvio Berlusconi (algo que rechaza) o los 54 del M5S para ser investido nuevo primer ministro.
Grillo insiste en que no votará la investidura de ningún Gobierno de otros partidos y que lo más que está dispuesto es a apoyos puntuales, ley a ley, siempre que estas entren dentro de su programa electoral, pero Bersani no se rinde, por más que las palabras del cómico en ocasiones se tornen muy hirientes.
Este sábado, después de que Grillo planteara en una entrevista en un medio alemán sus exigencias, incluida la reforma electoral, Bersani se mostró dispuesto a la propuesta del M5S de suprimir la financiación pública de las campañas de los partidos, pero pidió al cómico que asuma su responsabilidad y que muestre si hay un programa real detrás de todas esas peticiones.
En una entrevista que publica hoy el diario romano "Il Messaggero", Susanna Camusso, líder del sindicato mayoritario CGIL, próximo al PD, principal partido de la coalición de centroizquierda, asegura que el resultado de las pasadas elecciones ha acentuado "la fragilidad y las divisiones que ya existían en el país".
Camusso añade que, más allá del éxito de Grillo, el resultado electoral supone una clara derrota del primer ministro en funciones, Mario Monti.
"En presencia de una gran rabia social, de un gran machaque, puede hacerse irrefrenable la tentación de mandar a todos a ese sitio... Es un comportamiento que puede funcionar en la calle, pero no en el Parlamento", dice Camusso, en referencia a la vehemencia con la que Grillo ha pedido a los políticos que se fueran a sus casas.
