Un matrimonio italiano se ha suicidado en la localidad de Civitanova Marche, en la región de Las Marcas, situada en el centro de Italia, al parecer a causa de la crisis económica que les había sumido en un estado de extrema pobreza, informaron este viernes los Carabineros.
La pareja estaba formada por un hombre de 62 años y por una mujer de 68, jubilada con una pensión modesta, que según los investigadores "se encontraban en dificultades económicas" y, al parecer, decidieron poner fin a sus vidas ahorcándose uno junto al otro.
El marido se encontraba, como otros muchos italianos, en una situación provocada por las reformas del Gobierno de Mario Monti que al aumentar la edad de jubilación, se quedó en un limbo en el que no podía trabajar, ni cobrar la pensión.
Fueron los vecinos los que encontraron esta mañana los cuerpos sin vida de la pareja en su casa y dieron el aviso a los Carabineros.
La pareja, según las primeras investigaciones, no tenía dinero ni para pagar el alquiler de la casa.
El hombre había trabajado como empleado en una empresa de calzados y la mujer era una artesana jubilada.
El matrimonio no tenía hijos y los parientes más próximos están siendo avisados del drama, relataron los Carabineros.
El doble suicido, refieren los investigadores, se ha perpetrado bien anoche o bien esta mañana temprano y ha sido descubierto a las 08.00 hora local (06.00 GMT) de hoy por los vecinos que han encontrado la puerta abierta del garaje.
Los médicos no han podido hacer otra cosa más que testificar las muertes, agregan.
Todavía no se sabe si la pareja ha dejado una carta explicando los motivos por los que decidieron quitarse la vida.
Para los investigadores no hay dudas, los dos atravesaban dificultades económicas y habían hablado de su desgracia en varias ocasiones.
Pero el drama no finalizó en la calle Calatafimi, una vez conocida la noticia, el hermano de ella, de 70 años, se lanzó a las aguas del mar Adriático y murió ahogado, aseguran los Carabineros.
El cuerpo sin vida del hermano de la mujer fue recuperado por la Capitanía de puerto, sin que los intentos por reanimarlo tuvieron éxito.
EFE