El Gobierno de Venezuela, donde el hábito de fumar se cobra unas 6.000 vidas al año, manifestó hoy, en el Día Mundial sin Tabaco, su compromiso de endurecer la legislación que prohíbe la publicidad de marcas de cigarrillos, en medio de críticas a las "presiones" de las tabacaleras.
Según dijo el Ministerio de Salud venezolano en un comunicado, el Gobierno impulsa actualmente un proyecto para prohibir la publicidad, promoción y patrocinio del tabaco, que fue sometido a consulta pública y sólo falta que la ministra de Salud, Isabel Iturria, lo ratifique.
Esta iniciativa apunta a reforzar una ley del 2006 que prohibió la venta de cigarrillos al por menor y la publicidad en puntos de venta.
"Aún persisten algunas modalidades de promoción que el Ministerio del Poder Popular para la Salud (MPPS) aspira erradicar en su totalidad con una nueva disposición legal, actualmente en elaboración", señaló el ministerio.
Dos años después de la puesta en marcha de una ley antitabaco que prohíbe completamente fumar en espacios públicos cerrados y que prevé fuertes multas para los infractores, aún hay desafíos pendientes, como prohibir la publicidad y el patrocinio de las tabacaleras, dijo a Efe un funcionario gubernamental.
"Hay que tener una crítica permanente a las tabacaleras, que en vez de ayudar están perjudicando", dijo a Efe Orlando Colina, director del Centro de Atención Familiar de la Fundación José Félix Ribas, un organismo enfocado en la prevención de adicciones que funciona dentro del Ministerio de Salud.
"Tienen una agenda propia para presionar y hacen la vista gorda al daño que producen. Hay que caminar hacia la prohibición de la publicidad", agregó.
De acuerdo con cifras oficiales, el 17 % de los adultos venezolanos fuma, cifra que se ha mantenido estable desde el 2005 tras alcanzar un máximo del 33 % en 1984.
Los actos por el Día Mundial Sin Tabaco contaron también en Venezuela con una serie de actividades en las principales ciudades del país para generar conciencia sobre los efectos del consumo de cigarrillo.
Bajo el lema "El cigarrillo es una bomba de tiempo que puede acabar con tu vida", la Oficina Nacional Antidrogas lanzó una campaña que incluye el cambio de cajetillas de cigarrillos por camisetas, frutas y calcomanías y el despliegue de pancartas en los semáforos sobre los efectos nocivos del hábito de fumar.
Las cifras del Ministerio de Salud señalan que unas 6.000 personas mueren al año en Venezuela por enfermedades derivadas del consumo de tabaco.
