Con casi veinte minutos de retraso sobre la hora prevista, el concejal socialista Eduardo Vall ha salido al balcón de la Casa Consistorial para lanzar el Chupinazo, una vez que se ha retirado la gran ikurriñaque tapaba la fachada del Ayuntamiento.
La alegría se ha desatado en la plaza, donde miles de personas corean gritos de «San Fermín», con el pañuelo en la mano, dispuestos a iniciar nueve días ininterrumpidos de diversión.
«Nada ni nadie va a romper las fiestas», ha señalado Vall tras el incidente que ha empañado el inicio de la fiesta. Al edil socialista le acompañaba en el balcón del Ayuntamiento el alcalde Enrique Maya y Ana Isabel Rodeles, miembro de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE) que este año celebra su 75 aniversario.
El alcalde de Pamplona, Enrique Maya (UPN), se ha mostrado indignado por este «intento de torpedear» las fiestas en el «momento más importante del año» para la ciudad. «Aunque hay intolerantes que se empeñan en que en Pamplona no haya normalidad, no van a poder porque los pamploneses no quieren», ha señalado tras considerar «una vergüenza» lo ocurrido.
Con el despliegue de la enorme ikurriña que tapaba la fachada de la casa consistorial «se ha faltado al respeto a la institución del Ayuntamiento y a la ciudad de Pamplona».
Maya ha agradecido la postura de «todos los grupos municipales por entender con tranquilidad el momento de dificultad», aunque ha exceptuado a Bildu, del que «no quiero ni hablar porque dicen que no sabían nada», ha señalado tras destacar sus «ataques de amnesia» y relacionar los hechos con «la táctica habitual de Bildu y de los radicales, que están empeñados en que esto no funcione», según recoge Efe.
Sospechas evidentes
Ha indicado que ya se investiga «qué ha ocurrido, cómo ha podido llegar esa bandera ahí y quién la ha colocado, porque las sospechas son evidentes».
La portavoz de Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona, Eva Aranguren, que en lugar del pañuelico rojo llevaba anudada a la muñeca una ikurriña antes del chupinazo, ha justificado el despliegue de la bandera debido a los «obstáculos que se le ponen a este símbolo en todas las instituciones navarras» aunque ha asegurado no tener «nada que ver con lo que ha ocurrido en la plaza».
«En la plaza todos los años suele haber una reivindicación de la presencia de la ikurriña, que es una reivindicación social, de colectivos o personas, que en esta ocasión se ha hecho de esta otra manera», ha comentado.
Los concejales de Bildu visten con camisetas naranjas en favor de los presos etarras.
El juez de guardia ha abierto diligencias por los incidentes del Chupinazo por un «supuesto delito contra el orden público». La Junta de Portavoces del Ayuntamiento se ha reunido después del suceso para valorar la situación y expresar su condena.
La delegada del Gobierno en Navarra ha censurado que radicales hayan «entorpecido» este «emblemático» acto. Carmen Alba, que se encontraba en el interior del Consistorio, ha felicitado al agente de la Policía Municipal que ha cortado la sirga que sujetaba la ikurriña. Preguntada por si había detenidos por este incidente, Alba ha señalado, minutos después del lanzamiento del cohete, que no.
Un policía municipal ha resultado herido en la cabeza a causa de un botellazo durante una carga policial contra un grupo de personas que han lanzado distintos objetos y que se habían concentrado en la calle Chapitela durante los incidentes. Al agente se le han practicado varios puntos de sutura en la cabeza y su estado no revista gravedad, según han señalado a Efe fuentes de la policía municipal.
ABC