El diputado Ismael García solicitó ante el despacho de la Contralora General Adelina González la apertura de una investigación a la Fiscal Luisa Ortega Díaz por su supuesta “complicidad, por acción u omisión, ante los delitos de corrupción”, presentados ante el Ministerio Público y cometidos presuntamente por altos funcionarios del Gobierno.
El diputado Ismael García, quien acudió en compañía de los parlamentarios de la alternativa democrática, Miguel Pizarro, Hermes García y Julio César Reyes, entre otros, manifestó que es una “inmoralidad hablar de lucha anticorrupción y de poderes supremos para enfrentarlo, cuando los mayores casos de abuso y corrupción, son precisamente cometidos por los peces gordos y enchufados, del gobierno ilegítimo de Nicolás Maduro“.
“El día 3 de julio, consignamos ante la Fiscalía General de la República, una solicitud a la doctora Luisa Ortega Díaz, donde le ratificábamos las denuncias del caso Makled, de la Plataforma Deltana, del Fondo de Pensionados de Pdvsa, de Pudreval, de los banqueros prófugos, del audio de Mario Silva y, más reciente la red de espionaje y hackeo por parte de Mario Silva y Juan Almeida, y hasta la presente no hemos recibido respuesta, ni nos han citado a declarar”, recordó García a las puertas de la Contraloría tras la reunión con González.
El diputado insistió que “ya es tiempo que el país conozca quiénes son los verdaderos corruptos de este país”.
Asimismo informó que acudió a la instancia de la Contralora General en virtud de ser la presidenta del Poder Moral, y que actúe “eficientemente, porque ya han sido muchos los llamados que se le han hecho a Luisa Ortega Díaz para que actúe y no se convierta en cómplice de la corrupción roja, pero con su actitud de acción u omisión, los está encubriendo”.
Finalmente reiteró que espera que Adelina González actúe de manera eficiente y apegada a la Ley en función del bien del país, al tiempo que no descartó acudir a instancias internacionales “para que se sepa la verdad de lo que ocurre en Venezuela, donde los corruptos persiguen a los inocentes, en una especie de doble moral que cada día los somete al escarnio y cuestionamiento internacional”.
