La oposición bareiní decidió este miércoles suspender su participación en el diálogo nacional por la continua represión de las protestas y violación de los derechos humanos, un día después de la detención de un dirigente del partido chií Al Wefaq.
En una rueda de prensa conjunta de los grupos chiíes y liberales, el dirigente opositor Radhi al Musawi afirmó que las autoridades bareiníes tienen que asumir "la responsabilidad del fracaso del diálogo".
Al Musawi, presidente interino del liberal Waad, añadió que las autoridades bareiníes siguen tácticas para "ganar tiempo" mientras intentan acabar con las actuales protestas que piden reformas democráticas.
Los opositores, entre los que destaca Al Wefaq, aseguraron que su participación en el diálogo nacional dependerá de los avances futuros en materia de reformas políticas y derechos humanos.
No descartaron que si la situación no mejora opten por retirarse completamente del diálogo, cuya segunda ronda de consultas comenzó en febrero pasado sin que se atisbe una salida a la actual crisis.
"Las fuerzas democráticas opositoras llaman a la comunidad internacional a desempeñar su papel moral y comprometerse con los derechos humanos que sufren unas violaciones continuas" en Baréin, subrayaron estos grupos en un comunicado.
En esta línea, el secretario general de Al Wefaq, jeque Ali Salman, pidió durante la rueda de prensa a la comunidad internacional que presione a las autoridades de Baréin para cesar la represión, liberar a los detenidos e introducir reformas políticas verdaderas.
La oposición bareiní criticó, además, la detención ayer por treinta días del subsecretario de Al Wefaq, Jalil al Marzuq, acusado de instigar a delitos de terrorismo y estar vinculado con una organización terrorista, en referencia a la antigubernamental Coalición 14 de Febrero.
Las acusaciones se basan en un discurso que pronunció el pasado 6 de septiembre, en el que expresó su apoyo a dicha alianza e instó a seguir con las protestas pacíficas para exigir reformas políticas.
La oposición bareiní denunció también que desde el inicio del diálogo nacional el pasado 10 de febrero se han registrado 1.392 detenciones, entre ellas de mujeres y niños, y 93 casos de torturas dentro y fuera de las cárceles, de los que cinco han muerto.
Baréin, un pequeño reino de mayoría chií, es escenario desde febrero de 2011 de continuas protestas populares que han sido reprimidas por la fuerza por la monarquía suní gobernante.
Más de cien personas han muerto en estas protestas y miles han sido detenidas, según los datos de la oposición.EFE
En una rueda de prensa conjunta de los grupos chiíes y liberales, el dirigente opositor Radhi al Musawi afirmó que las autoridades bareiníes tienen que asumir "la responsabilidad del fracaso del diálogo".
Al Musawi, presidente interino del liberal Waad, añadió que las autoridades bareiníes siguen tácticas para "ganar tiempo" mientras intentan acabar con las actuales protestas que piden reformas democráticas.
Los opositores, entre los que destaca Al Wefaq, aseguraron que su participación en el diálogo nacional dependerá de los avances futuros en materia de reformas políticas y derechos humanos.
No descartaron que si la situación no mejora opten por retirarse completamente del diálogo, cuya segunda ronda de consultas comenzó en febrero pasado sin que se atisbe una salida a la actual crisis.
"Las fuerzas democráticas opositoras llaman a la comunidad internacional a desempeñar su papel moral y comprometerse con los derechos humanos que sufren unas violaciones continuas" en Baréin, subrayaron estos grupos en un comunicado.
En esta línea, el secretario general de Al Wefaq, jeque Ali Salman, pidió durante la rueda de prensa a la comunidad internacional que presione a las autoridades de Baréin para cesar la represión, liberar a los detenidos e introducir reformas políticas verdaderas.
La oposición bareiní criticó, además, la detención ayer por treinta días del subsecretario de Al Wefaq, Jalil al Marzuq, acusado de instigar a delitos de terrorismo y estar vinculado con una organización terrorista, en referencia a la antigubernamental Coalición 14 de Febrero.
Las acusaciones se basan en un discurso que pronunció el pasado 6 de septiembre, en el que expresó su apoyo a dicha alianza e instó a seguir con las protestas pacíficas para exigir reformas políticas.
La oposición bareiní denunció también que desde el inicio del diálogo nacional el pasado 10 de febrero se han registrado 1.392 detenciones, entre ellas de mujeres y niños, y 93 casos de torturas dentro y fuera de las cárceles, de los que cinco han muerto.
Baréin, un pequeño reino de mayoría chií, es escenario desde febrero de 2011 de continuas protestas populares que han sido reprimidas por la fuerza por la monarquía suní gobernante.
Más de cien personas han muerto en estas protestas y miles han sido detenidas, según los datos de la oposición.EFE