EFE-Ls restos mortales de Nelson Mandela llegaron hoy a su pueblo de Qunu, en el sureste de Sudáfrica, donde fueron recibidos por cientos de personas y donde el expresidente sudafricano será enterrado este domingo.
El cortejo fúnebre -saludado por miles de personas durante el trayecto desde el cercano aeropuerto de Mthatha- arribó a Qunu a las 15:56 hora local (13:56 GMT) escoltado por un largo convoy de efectivos de las fuerzas de seguridad.
El avión con los restos de Nelson Mandela llegó este sábado poco después de las 13.30 hora local (11:30 GMT) al aeropuerto de Mthatha, ciudad situada a 30 kilómetros de Qunu, la aldea en la que creció y donde recibirá sepultura.
Una procesión con el féretro del expresidente recorrerá la distancia entre Mthatha (Provincia del Cabo Oriental, en el sudeste del país) y Qunu, donde el clan Thembu del expresidente oficiará una ceremonia tradicional.
Decenas de personas esperan entre danzas tradicionales el féretro del héroe sudafricano en Qunu.
"He venido desde cerca de la ciudad de East London, a unas tres horas, porque quiero rendir mi último tributo a Nelson Mandela", dijo a Efe la joven Lungelo Magengelwa, enfundada en una camiseta amarilla con el rostro del expresidente.
"Es un momento muy emocionante, estoy a punto de llorar", añadió Magengelwa.
Junto a ella, mujeres vestidas con atuendos tradicionales xhosa -la etnia mayoritaria en la zona y a la que pertenecía también Mandela- bailan y cantan canciones en su idioma en recuerdo de su vecino más ilustre.
Mientras tanto, los organizadores del funeral de Estado que se oficiará mañana en Qunu reparten banderas a quienes ocupan, a la altura de la localidad, los márgenes a ambos lados de la carretera N2, por la que llegará el cortejo fúnebre.
Unos 4.000 personas, entre ellas una veintena de mandatarios internacionales y dignatarios como el Príncipe de Gales, asistirán este domingo al funeral del expresidente sudafricano.
Nelson Mandela falleció el pasado 5 de diciembre a los 95 años rodeado de su familia en su casa de Johannesburgo, tras una larga convalecencia por problemas respiratorios.
EFE