Romario, el mejor jugador del mundo en 1994, hizo gala hoy de la calidad que mantiene a los 47 años y anotó tres goles en un partido festivo, que mezcla jugadores en activo y retirados, jugado en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
El partido estaba organizado por Zico y terminó 7-3 a favor del equipo de los "amigos" del astro de la selección brasileña de 1982, que se enfrentaba a otro combinado llamado "Estrellas de Brasil".
Además de los tres goles de Romario, Zico marcó un golazo y su hijo, Thiago Coimbra anotó otro gol para los "Amigos de Zico", mientras que el argentino Darío Conca, que a partir de enero volverá al Fluminense, marcó para el equipo perdedor.
EFE