Estados Unidos condenó en un comunicado la decisión de Afganistán de liberar a 37 prisioneros que considera peligrosos por haber participado en ataques directos contra sus militares y las fuerzas armadas afganas.
"Esta liberación extra judicial de detenidos representa un gran paso atrás en el desarrollo del Gobierno de la ley en Afganistán", de acuerdo con el comunicado distribuido por las fuerzas de la OTAN en el país asiático (ISAF).
"Los prisioneros que van a ser liberados tienen sangre afgana en sus manos", subraya el documento.
De los 37 hombres encarcelados por Estados Unidos cuando dirigía la cárcel de Bagram que serán liberados próximamente, 17 de ellos están acusados de la producción o llevar a cabo ataques con artefactos explosivos improvisados, según el comunicado.
Además, Estados Unidos considera que cuatro de estos penitenciarios han participado en ataques directos que han causado la muerte de 42 soldados de la ISAF.
La agencia de inteligencia de Afganistán anunció a principios de mes que 72 de los 88 prisioneros encarcelados en Bagram son inocentes o pequeños criminales.
La investigación de la agencia de inteligencia afgana concluyó que no existen cargos contra 45 de los detenidos, 27 están acusados de delitos menores y que solo 16 de ellos son criminales y suponen una amenaza.
El presidente afgano, Hamid Karzai, dio entonces instrucciones para que los prisioneros contra los que no existen pruebas sean excarcelados, aunque no trascendió ni la fecha ni el número concreto de personas que serían liberadas.
Estados Unidos considera que el 40 % de los 88 prisioneros en disputa están implicados en acciones contra la ISAF y el Gobierno afgano.
Más de 600 prisioneros han sido liberados de la prisión de Bagram, una de las mayores bases de la ISAF en el país asiático, y rebautizada como Parwiz desde que pasó a manos afganas en marzo del año pasado.
Estados Unidos y Afganistán negocian un acuerdo militar para la permanencia de tropas estadounidenses en el país asiático tras la retirada de las fuerzas internacionales de la OTAN en 2014.
La Loya Jirga -Asamblea tradicional- aprobó el pasado noviembre el acuerdo, pero Karzai se niega a firmar el pacto hasta la celebración de las elecciones generales del próximo año, mientras que EEUU quiere que se rubrique cuanto antes.
Las tropas internacionales comenzaron en julio de 2011 a retirarse gradualmente del país y a transferir la competencia de la seguridad al Ejército y Policía afganos. EFE