Corea del Sur advirtió a Corea del Norte de que tendrá que pagar un "alto precio" si lleva a cabo otro test nuclear, después de que el país comunista amenazara el domingo con realizar un "nuevo tipo" de prueba atómica.
El Gobierno surcoreano anunció, sin embargo, que no existen signos de que Pyongyang pueda llevar a cabo una acción de este tipo de forma inminente.
Corea del Norte "debe escoger entre el aislamiento de la comunidad internacional -incluyendo a China, que se ha opuesto decididamente a más pruebas nucleares- y el camino hacia una mayor cooperación", declaró hoy el Ministro de Exteriores surcoreano, Yun Byung-se, durante un acto diplomático.
"El programa de armas nucleares de Corea del Norte es la mayor amenaza que existe en la actualidad", sentenció el canciller.
Mientras, una portavoz del Ministerio de Unificación de Seúl confirmó que "no existen signos que apunten a que Corea del Norte vaya a realizar un test nuclear de forma inminente".
Sin embargo, advirtió de que el régimen de Kim Jong-un está capacitado para "llevar a cabo en cualquier momento un ensayo nuclear o el lanzamiento de un misil de largo alcance".
Tales declaraciones llegan un día después de que el Ministerio de Exteriores de Corea del Norte anunciara en un comunicado que el país "no descarta un nuevo tipo de prueba atómica para elevar la capacidad de disuasión nuclear" del país frente a la "amenaza" que, a juicio del régimen, plantea Estados Unidos.
Todo esto llega en un momento marcado por la tensión, a la que han contribuido los ejercicios militares de Seúl y Washington realizan en la zona y la respuesta a éstos de Corea del Norte con lanzamientos de dos misiles de medio alcance y decenas de proyectiles de corto alcance.
EFE