Aumento de la gasolina produciría inflación mayor a 100 %
Desde hace tiempo todo el mundo lo espera. Nadie lo quiere. Algunos le temen a otros nos les conviene, pero su llegada es imperativa. Se trata del aumento en el precio de la gasolina, el cual aparentemente está bastante cerca, luego de que el presidente Nicolás Maduro anunciara que se harán debates sobre el tema.
Economistas coinciden en que -sin duda- el monto que los conductores deben pagar por el combustible debe incrementarse, pero advierten que una vez que la acción se haya ejecutado la inflación se disparará y podría ser incluso superior al 100%.
¿Pero, cómo podría darse un incremento gigante de los precios en general si el único que el Gobierno estaría aumentando es el de la gasolina? Porque precisamente esto causa dos efectos claros, responde José Guerra, profesor de la Escuela de Economía de la Universidad Central de Venezuela (UCV).
El primero es directo. Tiene que ver el transporte público y los taxis. Los precios de los pasajes, así como de las carreras subirían. El segundo efecto es indirecto y se refiere al costo de los fletes.
Al entrar a una tienda, caminamos por el pasillo y tomamos del anaquel aquel producto que necesitamos, pero ese rubro no llegó solo allí. Primero tuvo que ser trasladado desde su fuente originaria hasta el local comercial.
Ese paso implica un costo que el empresario debe pagar y que por ende incidirá en el precio final del producto, lo que generaría entonces la inflación.
“El aumento es inflacionario”, puntualizó el economista Luis Oliveros. Sin embargo un escenario sin ese paso tampoco es alentador. José Guerra indicó que -con la medida ejercida- a finales de año la inflación sería de 100%, sin ella llegaría a 70%. Ambas cifras altas.
Pero Oliveros da algunas esperanzas a mediano plazo. Si bien el efecto en el bolsillo del venezolano será inmediato, a mediano plazo, en dos o tres meses, cesará.
¿El momento o no?
Para Guerra, el precio de la gasolina no debería aumentarse en este instante, pues en el país está en puertas una unificación o convergencia cambiaria, cuyos efectos aún se desconocen.
Explica además que debe subir solo en el contexto de una discusión sobre las políticas petroleras. En contraposición, Oliveros indica que el aumento sí debe darse ya, pero aclara que esto no haría que el consumo de gasolina disminuya. La gente seguiría actuando de la misma manera.
Advierte, no obstante, que la pregunta en este caso es: ¿qué se va a hacer con el dinero extra? “Pdvsa recibiría unos 100 mil millones de bolívares más. ¿va a haber transparencia?”, cuestiona.
Guerra lo segunda: “Con la gasolina a Bs. 2,5 el litro, el Estado va a recibir 42 mil millones de bolívares adicionales. ¿Qué vamos a hacer con ese ingreso?, esa plata sale del bolsillo de los venezolanos”, precisa.
La cifra debe fluctuar
Oliveros manifiesta que una vez que se dé el aumento el Ejecutivo debe establecer reglas fiscales para que el precio fluctúe y no se mantenga fijo. Advierte que de no ser así en unos dos años la distorsión volvería.
El precio que el venezolano paga hoy por combustible es el más bajo del mundo y el Estado pierde dinero con el subsidio que permite mantener ese precio. Esto se solventaría con el aumento previsto, pero se corre el riesgo de que el problema vuelva si no se toman medidas para evitarlo.
El también profesor de Economía de la Universidad Metropolitana manifiesta que -a su juicio- el que el Gobierno haya sacado el tema en ese momento constituye la generación de “un pote de humo”, que diluya la atención que se presta a otros escenarios como el de la unificación cambiaria.
Según expertos, el precio justo de la gasolina debería estar entre 3,5 y 4 bolívares por litro. GLOBOVISION
