La región californiana de Napa Valley, golpeada el domingo por un intenso sismo, es uno de los principales pulmones de un sector vitícola estadounidense en plena expansión.
Nutrido por un clima seco, este valle de menos de 50 km de largo del oeste de Estados Unidos ha prosperado con sus cabernet sauvignons, merlots y pinot noirs, compitiendo con los vinos franceses y conquistando un lugar destacado en Estados Unidos.
En 2011, el condado de Napa produjo cerca del 20% de todas las botellas de vino fabricadas en Estados Unidos, contribuyendo con cerca de 26.000 millones de dólares a la economía de California y 50.000 millones en todo el país, según un informe de la compañía Stonebridge.
Esta actividad, distribuida entre algo menos de 500 explotaciones, genera 46.000 empleos en la región y más de 300.000 en todo Estados Unidos, según la organización profesional Napa Valley Vintners.
El sismo del domingo, el más fuerte registrado en la Bahía de San Francisco desde 1989, afectó a varias explotaciones cuando se anunciaba una prolífica cosecha. En internet podían verse fotografías de botellas de vino volcadas y barriles destruidos.
El impacto del terremoto en Napa Valley, no obstante, sigue siendo difícil de evaluar. Según la compañía especializada Eqecat, las pérdidas cubiertas por las aseguradoras podrían ascender a 1.000 millones de dólares en todo California.
"Es previsible que las pérdidas sufridas por el sector vinícola aumenten esta estimación", indica la compañía en su sitio de internet, que las vendimias ya habían comenzado.
"Si el siniestro hubiera tenido lugar antes de las cosechas, las pérdidas hubieran sido menores", agrega, y observa que el turismo en la región podría padecer las consecuencias del sismo.
La organización Napa Valley Vintners expresó su "profunda preocupación" por los productores y aseguró tener información de daños en bodegas, y en sitios de producción y acopio en el sur del valle.
La organización se dice prudente y "aún evalúa" los casos individuales de viticultores. "Esperamos saber más en las próximas 24 a 72 horas", indica la compañía en su comunicado.
Este sismo podría atenuar la buena salud de los vinos californianos en su conjunto, que representan la mitad del mercado estadounidense.
En 2013 sus ventas minoristas en Estados Unidos ascendieron a 23.100 millones de dólares, un incremento de 5% respecto de 2012, gracias a las cosechas "récord", según el Wine Institute.
Los vinos californianos representan además el 90% de las exportaciones de vinos estadounidenses, que ascendieron, según la misma fuente, a 1.550 millones de dólares.
Estados Unidos es desde 2010 el primer consumidor de vino del mundo, según el mismo informe.
Nutrido por un clima seco, este valle de menos de 50 km de largo del oeste de Estados Unidos ha prosperado con sus cabernet sauvignons, merlots y pinot noirs, compitiendo con los vinos franceses y conquistando un lugar destacado en Estados Unidos.
En 2011, el condado de Napa produjo cerca del 20% de todas las botellas de vino fabricadas en Estados Unidos, contribuyendo con cerca de 26.000 millones de dólares a la economía de California y 50.000 millones en todo el país, según un informe de la compañía Stonebridge.
Esta actividad, distribuida entre algo menos de 500 explotaciones, genera 46.000 empleos en la región y más de 300.000 en todo Estados Unidos, según la organización profesional Napa Valley Vintners.
El sismo del domingo, el más fuerte registrado en la Bahía de San Francisco desde 1989, afectó a varias explotaciones cuando se anunciaba una prolífica cosecha. En internet podían verse fotografías de botellas de vino volcadas y barriles destruidos.
El impacto del terremoto en Napa Valley, no obstante, sigue siendo difícil de evaluar. Según la compañía especializada Eqecat, las pérdidas cubiertas por las aseguradoras podrían ascender a 1.000 millones de dólares en todo California.
"Es previsible que las pérdidas sufridas por el sector vinícola aumenten esta estimación", indica la compañía en su sitio de internet, que las vendimias ya habían comenzado.
"Si el siniestro hubiera tenido lugar antes de las cosechas, las pérdidas hubieran sido menores", agrega, y observa que el turismo en la región podría padecer las consecuencias del sismo.
La organización Napa Valley Vintners expresó su "profunda preocupación" por los productores y aseguró tener información de daños en bodegas, y en sitios de producción y acopio en el sur del valle.
La organización se dice prudente y "aún evalúa" los casos individuales de viticultores. "Esperamos saber más en las próximas 24 a 72 horas", indica la compañía en su comunicado.
Este sismo podría atenuar la buena salud de los vinos californianos en su conjunto, que representan la mitad del mercado estadounidense.
En 2013 sus ventas minoristas en Estados Unidos ascendieron a 23.100 millones de dólares, un incremento de 5% respecto de 2012, gracias a las cosechas "récord", según el Wine Institute.
Los vinos californianos representan además el 90% de las exportaciones de vinos estadounidenses, que ascendieron, según la misma fuente, a 1.550 millones de dólares.
Estados Unidos es desde 2010 el primer consumidor de vino del mundo, según el mismo informe.
ANDINA