Las tormentas del Pacífico Sur, el brote de ébola en África Occidental y los conflictos como el de Siria son recordatorios de la necesidad de establecer sistemas de salud sólidos como parte medular de la reducción de riesgos de desastres.
Así lo enfatizó este domingo en Sendai la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la Tercera Conferencia Mundial de Naciones Unidas sobre la Reducción de Riesgos de Desastres, que tiene lugar en esa ciudad japonesa.
"Para superar las emergencias existosamente debemos afrontarlas con poblaciones más sanas y resilientes", dijo Bruce Aylward, director general adjunto para Emergencias de la OMS .
Agregó que el acuerdo que se negocia en Sendai para reducir los riesgos de desastres durante la próxima década reconoce el papel central de la salud para el propósito y exhortó a los países a esforzarse en el fortalecimiento de sus sistemas públicos de sanidad.
La OMS lanzará en Sendai el "índice de seguridad de los hospitales", un instrumento que ayudará a los gobiernos y autoridades de salud a medir la capacidad de los centros de salud de seguir funcionando en situaciones de emergencia.
El índice mide factores estructurales, funcionales, ambientales y de servicio del lugar donde están asentadas las instalaciones de salud.