El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció que fue dado de alta en la clínica en la que fue operado hace una semana de la rodilla izquierda y confirmó que estará tres semanas con muletas para su rehabilitación.
Morales hizo el anuncio en una conferencia de prensa ofrecida para hablar solo de su recuperación y su afición al fútbol, al salir de la clínica Los Olivos, en la ciudad central de Cochabamba.
El mandatario dijo bromeando que la rodilla operada no es la del "rodillazo", en alusión al golpe deliberado en los genitales que propinó a un rival en un reciente partido amistoso en la Paz, cuando el juego estaba suspendido.
También bromeó sobre la posibilidad de su vuelta al fútbol sea como arquero y prometió jugar uno de sus primeros partidos con los médicos que lo operaron, pero apuntó que no puede volver a las canchas antes de un mes o, en el peor casos, hasta tres.
Morales dijo que se incorporará a sus labores cotidianas, pero que seguirá las recomendaciones médicas, como la de no viajar durante una semana.
Comentó que recibió llamadas de sus colegas y amigos Hugo Chávez, de Venezuela, y Daniel Ortega, de Nicaragua, que se mostraron preocupados por su convalecencia.
Morales recibió el lunes pasado en el hospital la visita de la ministra de Exteriores de España, Trinidad Jiménez, y se reunió varias veces con sus ministros para atender asuntos de Gobierno. EFE
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