La justicia deportiva se pronunció tras ver las imágenes televisadas, donde se observa que Eto'o da un cabezazo en el pecho del defensa esloveno (minuto 37), en un gesto que recuerda al de Zinedine Zidane sobre Marco Materazzi en la final de la Copa del Mundo 2006 Francia-Italia.
El delantero camerunés, que también recibió una multa de 30.000 euros, no fue sancionado en el partido por el árbitro.
El domingo, el Chievo batió al Inter 2-1 (Eto'o redujo diferencias en el tiempo de descuento en partido de 13ª jornada del Campeonato de Italia).
El Inter anunció en su sitio Internet que presentará una apelación a la decisión.
La instancia disciplinaria de la FIGC explicó en la motivación de su decisión que "el gesto castigado, cometido por el futbolista nerazzurro pertenece a los más extremos del +comportamiento violento+" y "es claramente intencionado y potencialmente peligroso".
Además "la premeditación es evidente así como la energía del golpe", añade el comunicado de la Federación.
En las imágenes de televisión, Eto'o mira hacia el árbitro antes de dar el cabezazo, para asegurarse que el colegiado no ve la agresión.
La federación no sancionó al jugador del Chievo, rechazando la petición del Inter, que aseguraba que Cesar había sido el primero en agredir a Eto'o unos minutos antes, dando un puñetazo al futbolista camerunés.
Rafael Benítez, el entrenador del Inter, admitió tras el partido que su jugador había "perdido un poco el control", pero explicó que había sido "provocado" por Cesar.
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