El ex presidente Fidel Castro destacó hoy que Cuba y su revolución socialista “siguen en pie” a pesar de EE.UU. y su bloqueo “cruel y despiadado”, en un artículo donde admite que los revolucionarios cubanos han cometido errores pero “jamás” el de la traición, el engaño al pueblo o los abusos de poder.
Los medios cubanos, todos oficiales, publican hoy la última de las “Reflexiones” de Fidel Castro, titulada “Es hora ya de hacer algo” a propósito de la crisis alimentaria mundial pero donde también aprovecha para repasar la historia de Cuba.
“Cuba existe y sigue en pie, a solo 90 millas de Estados Unidos, librando su heroica lucha”, escribe Fidel Castro, de 84 años, quien resalta que la revolución socialista se mantiene después de haber visto a once presidentes estadounidenses y de episodios como la crisis de los misiles o la caída de la Unión Soviética, entre otros.
“También pasaron todos los Gobiernos que fueron cómplices de los crímenes de Estados Unidos contra Cuba, y nuestra Revolución se mantiene en pie. Desapareció la URSS, y la Revolución siguió adelante. No se llevó a cabo con permiso de Estados Unidos, sino sometida a un bloqueo cruel y despiadado”, escribe Castro.
En este sentido, resalta que la isla ha sido víctima de actos terroristas cuyos autores “gozan de total autoridad” mientras EE.UU. ha condenado a cadena perpetua a “luchadores antiterroristas” cubanos o que Washington mantiene la Ley de Ajuste Cubano por la que concede ingreso, residencia y empleo a quienes abandonan el país.
Cuba es el único país del mundo a cuyos ciudadanos se aplica ese privilegio, que se niega a los de Haití, después del terremoto que mató más de 300 000 personas, y al resto de los ciudadanos del hemisferio, a los que el imperio persigue y expulsa. Sin embargo, la Revolución Cubana sigue en pie”, insiste Castro.
En su artículo, el ex presidente también reconoce que se ha caído en fallos internos: “los revolucionarios cubanos hemos cometido errores, y los seguiremos cometiendo, pero jamás cometeremos el error de ser traidores”.
“Nunca hemos escogido la ilegalidad, la mentira, la demagogia, el engaño al pueblo, la simulación, la hipocresía, el oportunismo, el soborno, la ausencia total de ética, los abusos de poder, incluso el crimen y las torturas repugnantes, que con obvias, aunque sin duda meritorias excepciones, han caracterizado la conducta de los presidentes de Estados Unidos”, añade Fidel Castro.
Sobre la crisis alimentaria internacional, el líder cubano la atribuye a las políticas económicas de las grandes potencias y a los fenómenos del cambio climático y advierte que “los problemas son dramáticamente serios” pero que no todo está perdido.
Fidel Castro cree que el primer asunto a resolver por la comunidad mundial sería escoger entre alimentos y biocombustibles y que en este campo, Brasil, al ser un país en desarrollo, debería ser compensado.
“Si los millones de toneladas de soya y maíz que se invertirán en biocombustibles se destinan a la producción de alimentos, la elevación inusitada de los precios se pararía, y los científicos del mundo podrían proponer fórmulas que puedan detener e incluso revertir la situación. Se ha perdido demasiado tiempo. Es hora ya de hacer algo”, concluye Castro su extenso artículo EFE
Los medios cubanos, todos oficiales, publican hoy la última de las “Reflexiones” de Fidel Castro, titulada “Es hora ya de hacer algo” a propósito de la crisis alimentaria mundial pero donde también aprovecha para repasar la historia de Cuba.
“Cuba existe y sigue en pie, a solo 90 millas de Estados Unidos, librando su heroica lucha”, escribe Fidel Castro, de 84 años, quien resalta que la revolución socialista se mantiene después de haber visto a once presidentes estadounidenses y de episodios como la crisis de los misiles o la caída de la Unión Soviética, entre otros.
“También pasaron todos los Gobiernos que fueron cómplices de los crímenes de Estados Unidos contra Cuba, y nuestra Revolución se mantiene en pie. Desapareció la URSS, y la Revolución siguió adelante. No se llevó a cabo con permiso de Estados Unidos, sino sometida a un bloqueo cruel y despiadado”, escribe Castro.
En este sentido, resalta que la isla ha sido víctima de actos terroristas cuyos autores “gozan de total autoridad” mientras EE.UU. ha condenado a cadena perpetua a “luchadores antiterroristas” cubanos o que Washington mantiene la Ley de Ajuste Cubano por la que concede ingreso, residencia y empleo a quienes abandonan el país.
Cuba es el único país del mundo a cuyos ciudadanos se aplica ese privilegio, que se niega a los de Haití, después del terremoto que mató más de 300 000 personas, y al resto de los ciudadanos del hemisferio, a los que el imperio persigue y expulsa. Sin embargo, la Revolución Cubana sigue en pie”, insiste Castro.
En su artículo, el ex presidente también reconoce que se ha caído en fallos internos: “los revolucionarios cubanos hemos cometido errores, y los seguiremos cometiendo, pero jamás cometeremos el error de ser traidores”.
“Nunca hemos escogido la ilegalidad, la mentira, la demagogia, el engaño al pueblo, la simulación, la hipocresía, el oportunismo, el soborno, la ausencia total de ética, los abusos de poder, incluso el crimen y las torturas repugnantes, que con obvias, aunque sin duda meritorias excepciones, han caracterizado la conducta de los presidentes de Estados Unidos”, añade Fidel Castro.
Sobre la crisis alimentaria internacional, el líder cubano la atribuye a las políticas económicas de las grandes potencias y a los fenómenos del cambio climático y advierte que “los problemas son dramáticamente serios” pero que no todo está perdido.
Fidel Castro cree que el primer asunto a resolver por la comunidad mundial sería escoger entre alimentos y biocombustibles y que en este campo, Brasil, al ser un país en desarrollo, debería ser compensado.
“Si los millones de toneladas de soya y maíz que se invertirán en biocombustibles se destinan a la producción de alimentos, la elevación inusitada de los precios se pararía, y los científicos del mundo podrían proponer fórmulas que puedan detener e incluso revertir la situación. Se ha perdido demasiado tiempo. Es hora ya de hacer algo”, concluye Castro su extenso artículo EFE
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